Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 611

La familia Yves estaba conmocionada. ¿Quién era ese tal Wilbur y cómo era tan poderoso como para hacer que Braxton se comportara tan dócil repentinamente?

Faye suspiró aliviada. Parecía que Wilbur tenía el control de la situación, y no pudo evitar dejar escapar una sonrisa de orgullo.

Fabian miró fríamente a su familia, sonriendo para sí mismo mientras se maravillaba una vez más del poder de Wilbur.

Fabian podía ver cómo Wilbur tenía a Ciudad Seecher en sus manos, pero derrotar a Braxton con tanta facilidad... eso era otra cosa. Parecía que Fabian subestimó a Wilbur.

Sin embargo, al final se sintió orgulloso de tener un yerno tan capaz de controlar la situación con tanta facilidad. Ahora, Asher iba a darse cuenta por fin de quién era el verdadero héroe de la familia Yves y quiénes eran los inútiles.

Wilbur soltó una risita, retractándose de la contención espiritual que le impuso a Justin. "Sí, fue un malentendido. No tuve más remedio que sujetar a Justin porque estaba armando bastante escándalo. No quería que se hiciera daño”.

Las palabras de Wilbur fueron dichas con educación, pero Justin se sintió conmocionado hasta la médula.

Su padre parecía haber cambiado por completo después de aquella llamada. No solo ya no estaba enfadado con Wilbur, sino que además se volvió completamente manso. ¿Qué demonios acababa de ocurrir?

Braxton estrechó calurosamente la mano de Wilbur, invitándolo a sentarse mientras decía: “Sí, lo comprendo. Es por él y por Faye, ¿verdad? Yo también estaba en contra al principio, ¿sabe? Faye es la mujer más hermosa de toda Ciudad Águila. Justin apenas la merece, pero el mocoso se negaba a escuchar, y no pude hacer nada al respecto. Por eso ni siquiera aparecí hoy y mira cómo fueron las cosas. Si me lo pregunta, usted es la pareja perfecta para Faye, amigo”.

Las palabras de Braxton dejaron a la multitud estremecida.

Parecía que Wilbur era mucho más poderoso que Justin, e incluso que Braxton.

¿Pero no era solo el dueño de Cabo International? Al fin y al cabo, no era más que un hombre de negocios. ¿Cómo podía compararse con alguien como los Yaeger?

Justin se retractó de inmediato de todo lo que iba a decir, se volvió hacia Wilbur y se inclinó profundamente. “Lo siento, Señor Penn. Todo fue culpa mía”.

“Al menos ahora lo sabes. Escucha a tu viejo. Él sabe lo que es mejor para ti", dijo Wilbur.

Justin asintió profusamente, con un aspecto que no era más que manso y obediente.

Los príncipes de Ciudad Águila casi se orinan ante el espectáculo que tenían delante. ¿Quién demonios era ese tipo?

Justin parecía un caballero, pero cualquiera que lo conociera sabía lo arrogante y despiadado que era. Claramente, Wilbur era alguien de inmenso poder si era capaz de conseguir que se inclinara de esa manera.

La familia Yves se miró entre sí, con el miedo subiendo al pecho.