Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 838

De repente, se escuchó una fuerte explosión de su envío.

Henrod fue tomado por sorpresa. Rápidamente les ordenó que se detuvieran y salió del coche apenas pudo.

Vio un monstruo de más de diez metros de largo que escupía bolas de fuego en el aire. Algunas artillerías fueron voladas a pedazos al instante.

El monstruo no se detuvo ahí. Sus tropas estaban dispersas y los soldados gritaban y corrían presas del pánico. Un sin fin de personas murieron en el mar de fuego.

Henrod estaba temblando de ira e inmediatamente ordenó a través de su radio.

"Dispersense y contraataquen. Eliminen a esa maldita cosa".

Henrod tomó un rifle antimaterial de su coche después de dar las órdenes y comenzó a apuntar al monstruo.

El rifle antimaterial era un arma poderosa que ni siquiera los cultivadores nivel Santuario se atreverían a enfrentar.

Era una nueva arma que Lars le asignó. Un rifle antimaterial valía unos diez millones de dólares.

Sin embargo, una frialdad escalofriante invadió a Henrod.

Henrod fue tomado por sorpresa. Sintió que su cuerpo se congelaba, incapaz de darse la vuelta.

Vio una figura con una enorme espada de hielo en la mano, y esa figura se dirigía hacia él.

‘¿Karl?’, Henrod pensó.

Henrod conocía a Karl porque era un famoso cultivador de nivel Santuario en la región.

Henrod sabía que había llegado el momento de una batalla a muerte.

Él era solo un cultivador nivel Ambiente por lo que necesitaba depender de las armas si quería matar a Karl.

Gritó para activar toda su energía espiritual, que temporalmente eliminó la frialdad de su cuerpo.

Apretó el gatillo mientras apuntaba a Karl.

Se escuchó una fuerte explosión.

La Bala de Alto Poder Explosivo se disparó hacia Karl a una velocidad aterradora.

El poderoso rebote empujó a Henrod a más de diez metros atrás, dejando un profundo rastro en el suelo.

La bala alcanzó a Karl casi inmediatamente después del disparo.

Sin embargo, Karl estaba preparado para ello y había desatado su Dominio de Hielo de antemano.

La aterradora bala comenzó a bajar de velocidad una vez que entró en su Dominio.

Karl ni siquiera lo miró e inmediatamente se metió entre la caótica multitud.

La serpiente de fuego estaba causando caos desde el cielo al hacer llover constantemente bolas de fuego sobre ellos. Los soldados de Henrod fueron gravemente heridos.

Karl buscó aquellos que apuntaban a la serpiente de fuego en el suelo y los eliminó.

La gente común era como insectos para un cultivador de nivel Santuario. Cayeron muertos antes que pudieran ver a Karl.

Media hora después, el envío de coches militares se convirtió en basura fundida. Todos los coches fueron quemados y dañados. Aquellos que intentaron escapar también fueron asesinados por la serpiente de fuego.

No podían compararse con la velocidad de la serpiente de fuego.

Más de cien hombres se dieron por vencidos y se rindieron. Arrojaron sus armas y se arrodillaron, rogando por sus vidas.

Omar corrió ahí con la milicia de la iglesia en ese momento.

Karl y Omar rodearon a los que se rindieron. La serpiente de fuego aún volaba en el aire para inspeccionar los alrededores.

"¿Qué hacemos con ellos, Arzobispo?", Omar preguntó.

Karl hizo un gesto con la mano. Omar entendió al instante y dio la orden de eliminarlos a todos.