Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 930

Resumo de Capítulo 930: Viviendo con Mi Jefa Esposa

Resumo de Capítulo 930 – Viviendo con Mi Jefa Esposa por Internet

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Él no era más que un cultivador de nivel Aura, por no mencionar que arruinó su cuerpo con deseos hedonistas. ¿Dónde encontraría el valor para enfrentarse a Trevor?

Lo más importante en ese momento era asegurarse de que su familia estuviera a salvo. Nadie sabía si Trevor mataría a toda la familia de Stiles solo por su derrota.

Wilbur miró a Mason un momento antes de decir: "Transfiere el dinero a Christopher".

"Sí, señor", respondió Mason temeroso.

Wilbur dijo con calma: "No te preocupes. No soy una persona despreciable como tu padre. No mataré a tu familia. Puedes irte".

"Gracias, señor". Mason no estaba nada triste, pero también se sentía aliviado. Se inclinó y se fue.

En cuanto a los diez mil millones, se pondría en contacto con Christopher por separado.

Wilbur suspiró y dijo: "Tú también puedes irte. Yo también estoy a punto de irme".

"Señor, en cuanto llegue el dinero, se lo transferiré", dijo Christopher.

Wilbur asintió y dijo: "Encuentra a esos rehenes y ponte en contacto con la gente del Mercado del Sur. Haz que se los lleven. Además, deja ir al hijo de Damon".

"Sí, señor".

Wilbur hizo un gesto con la mano para que Christopher se marchara. Christoper hizo una reverencia y se marchó. La expresión de su cara cuando salió de la habitación de Wilbur era indescriptible.

Wilbur había sacado su teléfono para comprarse un boleto de avión, pero el vuelo más cercano era el de la mañana siguiente. Aún tenía que esperar.

Repasó todo lo que había sucedido en los últimos días, suspiró y se puso a meditar.

A decir verdad, Wilbur sentía que el Demonio del Reino era una existencia de más allá de este mundo. Como Stiles estaba demasiado enfadado y no quería decírselo, no se molestó en investigarlo.

No estaba en consonancia con su carácter ponerle las cosas difíciles a una persona que estaba a punto de morir, ni tampoco guardar rencor.

Un momento después, Sharon entró y preguntó: "¿Qué ocurre, señor Honard?". Ella siempre se había ocupado del casino. Desconocía lo que había ocurrido en el exterior.

"Libera inmediatamente a Tiff Kirk y tráela a mi despacho", dijo Samson con aprensión.

Sharon estaba confusa. "¿Por qué?".

"Stiles Dune ha sido derrotado. Wilbur Penn es Trevor Penn. Si algo le pasara a Tiff, tú y yo estamos condenados".

Sharon se quedó boquiabierta al oír lo que dijo Samson. Lo miró aturdida durante un buen rato, incapaz de creer lo que oía.

"¿Por qué sigues ahí de pie? ¡Ve!", ladró Sansón.

Sharon se estremeció. Preguntó vacilante: "Si la liberamos, seguiremos siendo carne muerta, ¿no?".

Samson se quedó atónito. Miró a Sharon y le preguntó: "¿Qué intentas decir?".

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