Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 987

Faron entró en pánico. Caminó hacia ella mientras le decía: "No hagas nada precipitado, Faye. Hablemos de esto".

"¡Para! ¡Me suicidaré inmediatamente si te atreves a acercarte!", gritó ella.

Faron se detuvo apresuradamente y miró a Faye frenéticamente.

Faye era muy poderosa en la empresa, pero dejaba una impresión gentil en la gente de la Isla Lago Marino.

Nunca la habían visto actuar como una loca.

Faron entró en pánico porque no sabría qué hacer si alguien moría.

Wilbur miró a Faye y le tendió la mano lentamente. Le dijo: "Faye, relájate. Sé que te has sentido muy maltratada, pero primero baja el cuchillo".

Faye dijo en voz alta: "¡No te muevas! Sé que eres asombroso y que puedes acabar conmigo en cualquier momento, pero si no me das una respuesta hoy, intentaré suicidarme todos los días. ¿Puedes controlarme a cada instante?".

Wilbur bajó la mano impotente.

Faron se mostró lleno de pánico. Observó la situación y luego huyó del lugar.

Nancy lloraba en silencio.

Lloró y se inclinó ante Faye. Dijo: "Lo siento, Faye. No debí haber invitado a Wilbur a mi boda. Todo es mi culpa. Por favor, no lo molestes más. Me iré enseguida".

Luego, caminó hacia la puerta sin mirar atrás.

Faye gritó: "¡Alto ahí! Nadie se va hasta que Wilbur me dé una respuesta".

Nancy se estremeció. Se quedó en silencio con lágrimas en los ojos. Bajó la mirada y sollozó en voz baja.

"Faye, esto es culpa mía. No molestes a Nancy, ¿de acuerdo?", preguntó Wilbur.

Faye se rio y preguntó: "¿Sí? ¿Te da lástima? Entonces, parece que soy la tercera en discordia".

"No es eso, Faye. Era una situación única entonces y Nancy estaba siendo maltratada. Yo solo intentaba evitar que sufriera más humillaciones. Por eso hice lo que hice", dijo Wilbur.

Faye preguntó fríamente: "¿Así que estás diciendo que no te gusta?".

Faye miró fríamente a Wilbur con un cuchillo en el cuello.

Faron tenía cara de pánico y frenesí.

Nancy sollozaba suavemente con la mirada baja.

Todo estaba tenso y silencioso.

Wilbur dijo despacio al cabo de un momento: "Faye, mi amor por ti nunca ha cambiado. También admito que me gusta Nancy, pero si tengo que elegir, te elijo a ti".

Nancy se secó las lágrimas y levantó la vista con una sonrisa.

Sin embargo, su sonrisa era amarga.

"¿Puedo irme ya, Faye?", preguntó Nancy en voz baja.

Faye miró a Wilbur y le dijo fríamente: "Es difícil de creer una elección que te obligué a hacer".