Vuelve a casarse: Su ex esposa multimillonaria romance Capítulo 51

Después de entrar al palco, Jana dijo con sorpresa a Julio: "Papá, ¿quién es ese Sr. Aranda?".

¿No era Guadalupe un don nadie?

Pero, ¿por qué su padre era tan cortés con el Sr. Aranda?

Julio dejó de sonreír: "Solo hay una familia Aranda en Nueva York. ¿Quién más podría ser ese Sr. Aranda?".

Jana había supuesto esto, pero no lo creía. Escuchando las palabras de Julio, estaba impactada, y su rostro se volvió ligeramente pálido: "¿Cómo es esto posible? ¡Cómo podía la familia de Guadalupe ser la más rica de Nueva York!".

Si Guadalupe fuera la hija de Marcos, sería ridículo que Olivia y Jana se burlaran de ella.

Jana no lo creía, pero lo que Julio dijo a continuación la impactó por completo.

"No me importa lo que sucedió entre Guadalupe y tú, pero si te atreves a tratar a Guadalupe como antes, ¡suspenderé todas tus tarjetas!".

"Papá...".

Jana miró a Julio con sus ojos bien abiertos. Incluso, la señora Biel, quien usualmente la mimaba mucho, no dijo nada para defenderla. Solo dijo: "Jana, sé una buena chica. No podemos ofender a la familia Aranda".

Marcos era el hombre más rico de Nueva York y la señora Aranda pertenecía a una familia oficial. Así que, personas como ellos, no se atreverían a ofender a alguien de dicha familia.

Guadalupe llevó a Marcos y María al palco. Algo se le ocurrió repentinamente a Marcos cuando se sentó: "¿La hija de Julio está muy familiarizada con Olivia?".

Guadalupe, quien se estaba sirviendo un café, hizo una pausa y miró a Marcos: "¿Papá?".

"Niña tonta, sé que te molestaron". Marcos resopló.

Aunque su relación de padre e hija se había cortado durante esos tres años, no significaba que Marcos ignorara por completo a Guadalupe.

Guadalupe era buena en todo, excepto en que era demasiado terca.

Durante su estadía con la familia Ávila, Marcos sabría fácilmente cómo la pasaba Guadalupe ahí.

Guadalupe y Olivia se habían peleado varias veces. ¿Cómo podría Marcos no saber nada sobre ello?

Guadalupe miró a Marcos. "Entonces, ¿vas a hacerles algo por lo que hicieron?".

María dijo desde un lado: "Podemos ignorar lo sucedido antes de tu divorcio, pero si la familia Ávila se atreve a molestarte nuevamente, ¡sabrán quiénes somos!".

"¡Papá!".

Guadalupe no pudo evitar interrumpir a Marcos: "Tú y mamá duérmanse temprano. Los llevaré al aeropuerto mañana".

Marcos miró el reloj y dijo: "Se está haciendo tarde. Tú también deberías regresar. Ten cuidado".

"Entendido, papá. Buenas noches".

"Buenas noches".

Guadalupe se despidió, cerrando la puerta y saliendo de la habitación.

Tan pronto como subió al auto, Ainoa llamó.

Guadalupe se puso sus Airpods y contestó el teléfono mientras conducía: "¿Sí?".

Ainoa, que estaba deslizando la tableta en su mano, estaba muy emocionada: "Guadalupe, finalmente has pensado bien las cosas. ¿Ya no ocultas tu identidad como la chica de la familia Aranda?".

Guadalupe sonrió. "Relájate, ¿de acuerdo?".