Vuelve a casarse: Su ex esposa multimillonaria romance Capítulo 68

Guadalupe no esperaba un giro tan grande.

La aparición repentina de Luna fue como una espina que le apuñaló el corazón.

Cuando el auto se detuvo, Sheila la llamó: "Srta. Aranda, hemos llegado".

Guadalupe apartó la mirada. "¡Está bien, buenas noches! Regresaré primero".

Cuando Sheila vio que la expresión de Guadalupe no había cambiado, se contuvo.

"Srta. Aranda".

Tan pronto como Guadalupe salió del auto, escuchó una voz familiar. Se dio la vuelta y vio a Noah saliendo de un auto deportivo.

Guadalupe sonrió y saludó: "Hola, Sr. Chistau".

Guadalupe pensó que Noah se había dado por vencido con ella porque no se habían visto en varios días, pero, para su sorpresa, él vino a buscarla esta noche.

"La luna está brillante esta noche. ¿Salimos a dar un paseo?".

Noah la miró; sus ojos parecían brillar. Guadalupe esquivó su mirada inclinando ligeramente la cabeza. "Pero hay viento, Sr. Chistau".

Noah tosió. "No estoy de humor. ¿Te importaría dar un paseo conmigo?".

Ella también estaba de mal humor.

Lo miró durante dos segundos y dijo lentamente: "¿Qué pasa si sí me importa?".

Noah no respondió. En cambio, abrió la puerta y dijo: "Súbete".

Guadalupe sonrió y subió al coche sin dudar.

El coche deportivo azul estaba acelerando en la calle principal. Guadalupe abrió la ventana; el viento frío refrescó su cara e hizo que le doliera.

No había dicho nada desde que subió al coche. Noah se detuvo en un semáforo en rojo y se giró para verla. Su mirada se posó en el rostro de Guadalupe. "No eres feliz, ¿verdad?".

Guadalupe miró hacia otro lado. "Sr. Chistau, ¿quiere enderezarme?".

"¿No podemos hacérnoslo el uno al otro?".

Guadalupe sonrió. "Entonces, ¿por qué es infeliz?".

"Porque parezco no ser digno de mi futura novia".

Guadalupe no pudo evitar reírse. "¿Es tan inseguro?".

Noah frunció los labios y la miró con una media sonrisa. "Srta. Aranda, de hecho soy un poco inseguro".

"Sr. Chistau, no necesita hacerme bromas así".

¿Cómo podría la familia Chistau ser incapaz de rivalizar a la familia Aranda? ¡Era muy chistoso!

Noah no continuó con el tema. En cambio, le preguntó a Guadalupe: "Entonces, ¿por qué eres infeliz?".

La sonrisa en el rostro de Guadalupe se desvaneció. "Porque de repente alguien me apuñaló. Me siento muy incómoda".

Guadalupe lo miró y esbozó una sonrisa desolada. "Sí, todo el mundo en Los Ángeles lo sabe".

Pero ella no era de Los Ángeles.

Noah la miró y entrecerró los ojos. "¿Puedes soportar tales cosas?".

"¡No!".

Guadalupe apretó los dientes.

Ella realmente no podía soportarlo.

"Está bien, volveremos".

Después de que Noah terminó de hablar, condujo rápidamente el coche hacia la casa de Aritz.

Después de unos segundos, Guadalupe finalmente reaccionó. "¿Noah?".

"Estoy aquí", dijo Noah casualmente como si no entendiera lo que quería decir Guadalupe.

El viento afuera aullaba y, de repente, la refrescó. "No importa, Noah".

Ella y Aritz ya se habían divorciado y, si iba a ajustar cuentas con él, se sentiría aún más miserable.

"¿Por qué? ¿No estás enojada?".

Noah resopló ligeramente. No tenía intención de detener el coche y cambiar de dirección.