Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 1600

Al mediodía, Ling Yiran y el resto encontraron un restaurante en el parque de diversiones para comer. Los dos pequeños estaban un poco cansados ​​de jugar, así que tenían un gran apetito.

Después de la comida, armaron un revuelo porque querían jugar en la zona infantil del restaurante.

Muchos niños jugaban en aquella zona infantil. Ling Yiran le dijo a Yi Jinli: "Llevaré a los dos niños allí primero".

Se dirigió hacia la zona infantil con los dos niños, sosteniendo una mano de cada uno.

Yi Jinli miró sus figuras. Había una mirada inusual de dulzura en sus ojos. Eran los miembros más importantes de su familia, y él solo les mostraría exclusivamente su gentileza a ellos.

Quizás lo único que le preocupaba ahora era... la verdadera razón por la que ella lo había dejado antes.

'¿Y si... ella me dejó porque no podía aceptarme? ¿Qué debería hacer? ¿Debería encontrar una manera de asegurarme de que ella nunca recupere ese recuerdo o...?’

Un toque de incertidumbre pasó por los ojos de Yi Jinli.

Ling Yiran dejó que los dos niños jugaran en la zona infantil mientras ella observaba desde la valla un poco más alejada. También le recordó al hermano y a la hermana que se cuidaran el uno al otro.

Los dos pequeños respondieron. Entonces, Yi Qianjin corrió hacia el tobogán, sosteniendo felizmente la mano de su hermano. Ling Yiran miró a los dos niños jugando en el interior con una sonrisa. Sin embargo, no pudo evitar quedarse atónita cuando sus ojos vieron a las otras dos figuras en la esquina de la zona infantil.

Una de ellas era la misma niña que había visto antes. Estaba de cuclillas frente al niño como si le estuviera diciendo algo.

El niño pequeño también estaba en cuclillas en la alfombra suave, mirando a la niña con sus ojos oscuros.

Aunque los ojos del niño daban una sensación de vacío, parecía estar escuchando a la niña con mucha atención.

Mientras los dos niños estaban cerca del otro a un lado de la valla, Ling Yiran se acercó de forma inconsciente a ellos.

Entonces, escuchó a los dos niños hablar...

"Pequeño Ci, ¿estás seguro de que no quieres jugar? Es divertido. Mira, todos están jugando. Juguemos también, ¿de acuerdo?".

El niño se mantuvo en silencio, simplemente miraba a la niña sin moverse.