Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 1114

Charlotte se veía molesta. “No quiero verte. ¿Qué quieres? Puedes decírmelo por teléfono”.

Renata la saludó con la mano.

“Tiria, vine aquí hoy por tu propio bien. Ya que estoy aquí, ¿por qué no sacas unos minutos de tu agenda para verme?”.

Charlotte terminó la llamada con impaciencia, se despidió de Zenios y caminó hacia Renata.

Renata respiró profundamente por los nervios cuando la vio finalmente caminando hacia ella. Luego, se movió rápidamente para recibir a Charlotte.

“Solíamos ser mejores amigas. Anteriormente, Melina y yo nos unimos y te hicimos mucho daño. A partir de ese momento no volvimos a hablar. Yo…”.

“No hablemos del pasado”.

Charlotte interrumpió a Renata.

“¿No dijiste que tenías algo importante que decirme? Ve directo al grano”.

Renata parecía un poco avergonzada. Ella se calmó y dijo: “Anoche, tu madrastra me visitó. Quería que la ayudara a hacerte daño”.

El rostro gordo de Virginia apareció en la mente de Charlotte.

Desde que había recuperado sus recuerdos, había canalizado toda su energía para revivir a Zachary y vengarse de Lorraine. Había empujado a Virginia a un segundo plano en su mente.

Sin embargo, eso no significaba que iba a dejar que Virginia se saliera con la suya.

Aunque la verdadera Sotiria estaba muerta, ella había estado viviendo detrás de su identidad durante más de cuatro años. Había desarrollado sentimientos por Sotiria y Marco. Tenía que ayudar a Sotiria a deshacerse de su despiadada madrastra para que pudiera descansar en paz…

“Porque no quiero lastimarte”.

Renata miró a Charlotte, sintiéndose avergonzada.

“Tiria, puede que te haya odiado por arruinar mi matrimonio, pero has sido muy amable conmigo en los últimos cuatro años. Cuando cortaste lazos conmigo ese día, me sentí muy culpable. No debí hacerte eso. Esta vez, no voy a lastimarte”.

“¿Oh? Ya veo…”. Charlotte hizo una pausa pensativa. De repente, sus ojos se iluminaron. “Renata, creo que deberías lastimarme de nuevo”.

“¿Qué?”. Renata quedó claramente sorprendida.

“Tiria, tienes que creerme, realmente me arrepiento de mis acciones. No quiero lastimarte. Solo vine a verte porque quería advertirte. Virginia realmente quiere lastimarte, y definitivamente debes estar en guardia. La llamaré después de que nos separemos y le diré que te negaste a arreglar las cosas conmigo. Entonces, le devolveré los 7,800 dólares. Deja de bromear conmigo…”.

“No estoy bromeando. Estoy hablando en serio”. Charlotte enarcó las cejas y sonrió con malicia.