Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 1402

Distrito del Divino Santuario.

El guardia de seguridad estaba desplomado en su silla, escribiendo un nombre.

Zachary era escoltado con frecuencia durante los últimos días para una investigación, haciendo que todos entraran en pánico. Aparentemente, Zachary ofendió a un enemigo formidable. Esta vez, Zachary tuvo dificultades para escapar de este lío. Incluso su familia había sido afectada. La casa de Zachary sería allanada muy pronto, y los miembros del personal de trabajo más pequeños como él pronto se dispersarían…

¡Toc, toc, toc!

Los golpes en la puerta persistieron durante mucho tiempo antes de que el guardia de seguridad los notara. Vio el rostro exquisitamente hermoso detrás del cristal y se estremeció como si lo hubieran bañado en agua helada.

“Ah, Señorita Simmons. Lo siento mucho. Estaba pensando en algo. ¡Ya voy! Le abriré el portón”.

Él sonrió y le hizo una señal de “bien” mientras presionaba el botón “abrir” en el control remoto, abriendo el portón para Charlotte.

Charlotte deseaba mucho ver a Zachary en ese momento. Ni siquiera le habló al guardia de seguridad. Inmediatamente condujo su coche y entró al patio.

El Distrito del Divino Santuario se veía igual que siempre. Magnífico, lujoso y deslumbrante, como un palacio.

Tan pronto como Charlotte entró en la sala, Janet, que estaba limpiando el lugar, le dio la bienvenida.

“Oh, ¿qué la trae por aquí, Señora? ¿No tiene que filmar hoy?”.

“No”. Charlotte, cuya mente estaba llena de preocupaciones, no le dio explicaciones. En cambio, simplemente dijo: “Llame a Lucas. Él dijo que Zachary estaba en casa”.

Janet señaló el segundo piso.

“Sí, el Señor Connor está en casa. Está descansando en su habitación en este momento”.

Charlotte rápidamente se dirigió a la escalera de caracol tan pronto como dijo eso.

Como era de esperar, Zachary estaba dormido.

El hombre majestuoso parecía tan fresco y regio como siempre mientras dormía. Su apuesto rostro parecía tallado con un cuchillo, y su cuerpo en forma era firme, sin ningún signo de gordura.

Charlotte se sentó en el borde de la cama, mirándolo suavemente. Ella no pudo evitar sonreír. Su corazón floreció con calidez, pero las lágrimas rodaron por sus mejillas y gotearon sobre su rostro.

Él permaneció profundamente dormido.

Sabía que él siempre estaba muy alerta. Su sueño profundo era prueba de que estaba completamente agotado.

Quería despertarlo y pedirle que la abrazara, luego decirle todo lo que había en su corazón que nunca tuvo la oportunidad de decir… 'Zachary, ¡te amo!'.

Porque sabía que esta era probablemente la última vez que se verían. Si no se lo decía ahora, es posible que no volviera a tener esa oportunidad.