Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 182

Inesperadamente, la actitud de Tiffany hacia él había cambiado drásticamente después de su encuentro sexual y el rostro del hombre mostraba insatisfacción.

Tiffany se burló. “¿Eres sordo o retrasado? ¿Planeas quedarte en mi casa el resto de la noche? ¡Lárgate!”.

“¡Jaja!”. El acompañante se rio a carcajadas, desahogando su ira extrema. “¡De acuerdo! ¡De acuerdo! Solo soy un producto comprado por la legendaria superestrella Tiffany Miller. Eres mi clienta, así que cuando me pidas que me vaya, debería irme... Sin embargo, ¡ya no tengo ganas de irme!”.

“¡Tú!”. Tiffany estaba tan enojada que saltó de la cama y se sentó.

El hombre se rio aún más irónicamente. “Oh, Superestrella Miller, ten cuidado de no torcerte la cintura. Ya me voy. Descansa”.

“¡Lárgate! ¡Sal!”. Tiffany recogió la almohada y se la arrojó al hombre.

El hombre levantó las cejas con desdén.

¡Tch!

Todo el mundo la llamaba una diva perfecta. Pura, inocente, intangible, etc. ¡Pfft! Desde su perspectiva, incluso sus colegas femeninas eran más puras que Tiffany. Al menos, ella no se promocionaban como ovejas inocentes…

El hombre cerró la puerta de golpe y se fue, por lo que Tiffany se quedó sentada en la cama sola.

Charlotte miró a Tiffany inexpresivamente a través de los huecos entre las cortinas.

Si no lo hubiera presenciado con sus propios ojos, Charlotte nunca hubiera creído que Tiffany haría algo así.

Tiffany había hecho todo lo posible para separarla de Bryson. Ahora que Bryson la tenía en sus brazos como un tesoro, había logrado todo lo que miles de mujeres soñaban…

Sin embargo, todavía estaba descontenta e indómita. ¡No tenía límites!

Bzzz, bzzz, bzzz… El celular de Tiffany seguía vibrando.

Al ver el identificador de llamadas en la pantalla, Tiffany parecía nerviosa. Respiró hondo unas cuantas veces y se aclaró la garganta antes de contestar el celular.

“Bryce…”. Su voz sonaba tan delicada y encantadora que podría convencer a alguien para que le trajera la luna.

Aunque Bryson la amaba profundamente, nunca había sido íntima con ella. Bryson solo la había besado dos veces, y solo habían sido ligeros piquitos en sus labios. Mientras ella no estuviera expuesta, Bryson no notaría nada malo. Sin embargo, tuvo que bañarse antes de salir a ver a Bryson.

Tiffany se levantó perezosamente de la cama y se dirigió al baño.

“¿No planeas irte?”. El aliento de Zachary rozó las mejillas de Charlotte como una brisa fresca.

Al mismo tiempo, Shayne empujó el celular frente a ella.

“Jaja, gracias…”. Echando un vistazo a su rostro sombrío y frío, Charlotte le dedicó una sonrisa rígida levantando las comisuras de los labios, guardó el celular y siguió a Zachary hasta el borde de la ventana.

El alféizar de la ventana solo tenía más de un metro de altura, pero Charlotte nunca haría un movimiento torpe incluso si hubiera tenido que subirse y bajarse de ese alféizar cientos de veces en el pasado.

Sin embargo, con Zachary presente, estaba tan nerviosa que sus manos y pies se pusieron rígidos y accidentalmente golpeó la maceta en el alféizar de la ventana.

¡Crac! La maceta cayó al suelo, haciendo un gran ruido.