Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 370

Ella se quedó mirando el lugar donde había estado el apuesto rostro de Zachary, y su corazón golpeó contra su pecho como un tambor, una reacción tardía de algún tipo.

'¡Lo sabía! ¡Un hombre anticuado y aburrido como Zachary no sabe cómo manejar una broma! Pero… ¿de verdad va a crear un bebé conmigo esta noche?'.

Zachary era como un animal salvaje cada vez que tenía sexo con ella. No solo era un proceso insoportable, sino que ella estaría adolorida durante los próximos días…

'Pero, ¿por qué siento una pequeña sensación de anticipación cada vez que pienso en lo que me va a hacer esta noche? ¡M*ldita sea!'.

Charlotte se golpeó la cara enrojecida y ardiente.

'¿Te has vuelto loca, Charlotte Simmons?'.

Diez minutos después, Charlotte escuchó pasos provenientes de la escalera de caracol de afuera. Jebediah y Lorraine estaban bajando las escaleras.

Ellos se quedarían a cenar.

Zachary mantuvo su exterior helado en la mesa del comedor. No había expresión en su rostro y era muy reservado.

Jebediah y Lorraine tampoco hablaron mucho.

Charlotte encontró el ambiente muy extraño. Ella tomó algunos bocados y dijo: “Estoy llena. Disfruten de su comida”.

Ella dejó sus cubiertos y se marchó de la mesa del comedor.

Lorraine no pudo ocultar su sorpresa.

Zachary no solo era regio y principesco. También era un hombre muy perfecto. Él priorizaba los modales en la mesa y despreciaba a aquellos que no mostraban ningún respeto por ellos, por lo que Lorraine siempre era particularmente cuidadosa cuando comía con él.

Charlotte no mostró respeto por los modales cuando comía. Era tan despreocupada como un plebeyo comiendo al borde de la calle. Ella incluso había tirado sus cubiertos a un lado después de terminar de comer…

“Estaba hablando con tu criada y descubrí algo muy interesante: Zach ha declarado que su habitación es una zona prohibida y no puedes entrar en ella. Aparentemente, por lo general eres bastante dócil y tienes demasiado miedo de entrar. Tu criada no puede estar bromeando, ¿verdad?”.

La voz sombría y sarcástica de Lorraine habló detrás de Charlotte.

Charlotte se volteó instintivamente hacia el dormitorio de Zachary. “Eso es entre Zachary y yo. No es de tu incumbencia”.

“¿Ah, en serio?”.

Lorraine se puso de pie, el desdén en sus ojos era dolorosamente obvio.

“Eso me suena realmente extraño. Zach ni siquiera te deja entrar a su habitación, así que, ¿cómo diablos planeas tener un bebé con él? ¿Con reproducción asexual?”.

A pesar de su culpa, Charlotte respondió obstinadamente: “¿Eres estúpida? El hecho de que no me deje entrar en su habitación no significa que no lo dejó entrar en la mía. Siempre podemos concebir en mi habitación. ¿No crees?”.