Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 563

Resumo de Capítulo 563 Una mentirita tras otra: Amor Adictivo de CEO

Resumo de Capítulo 563 Una mentirita tras otra – Capítulo essencial de Amor Adictivo de CEO por Internet

O capítulo Capítulo 563 Una mentirita tras otra é um dos momentos mais intensos da obra Amor Adictivo de CEO, escrita por Internet. Com elementos marcantes do gênero Romance, esta parte da história revela conflitos profundos, revelações impactantes e mudanças decisivas nos personagens. Uma leitura imperdível para quem acompanha a trama.

En la Unidad de Cuidados Intensivos, Sala 201…

Dos enfermeras estaban paradas a ambos lados de la cama del hospital, seguían mirando a Lorraine, que estaba acostada en la cama.

El doctor había ordenado específicamente que cuidaran bien a la paciente.

Lo primero que hizo la paciente al despertar del sedante de la operación fue clamar por mirarse en el espejo. Sin embargo, cuando la enfermera le dio un espejo, realmente se había vuelto loca y quiso arrancarse la gasa envuelta alrededor de su rostro, diciendo que tenía que saber cómo se veía su rostro ahora…

Afortunadamente, las enfermeras la habían detenido a tiempo.

Miraron el lado derecho de su rostro, que no estaba cubierto por una gasa. La piel era extremadamente delicada y su tez era tan clara como la nieve. Parecía una obra de arte tallada por Dios. Podría imaginarse que alguna vez fue una belleza incomparable si su lado izquierdo fuera tan perfecto como el derecho.

Sin embargo…

Si ella viera cómo se veía ahora su lado izquierdo, ¿qué tan devastador sería? ¡Definitivamente se volvería loca!

Lorraine estaba sentada quieta en la cama en este momento, como una muñeca de porcelana rota.

No fue hasta que se abrió la puerta y vio un rostro apuesto, que había un rastro de anticipación y vida en sus ojos. “Zachary”.

Los pasos de Jebediah se detuvieron por una fracción de segundo, y la pérdida y la lástima se entrelazaron en sus ojos glaciales. “Lory, soy yo”.

La esperanza en los ojos de Lorraine desapareció instantáneamente. “¿Dónde está Zachary? La operación terminó hace 15 minutos. Me dijiste que él estaba en el hospital la última vez que viniste a verme. ¿Por qué no ha venido a verme?”.

“Lory, no te agites demasiado. Él vino al hospital tan pronto como se enteró de que estabas herida. Pero ahora tiene algo urgente que atender. Definitivamente vendrá a verte cuando haya terminado”. Mientras miraba el miserable estado en el que se encontraba Lorraine, rastros de dolor y lástima cruzaron por los ojos de Jebediah.

“¿Hay algo que realmente no pueda dejar temporalmente? Estoy gravemente herida, ¿hay algo más importante para él que verme ahora?”. Lorraine tembló de pies a cabeza.

Después de la operación, la persona a la que Lorraine más quería ver era Zachary.

Lorraine sintió como si la realidad la hubiera abofeteado. La única sensación que sintió en ese momento exacto fue el dolor ardiente en la mejilla. Dolió incluso más que cuando le cortaron la mejilla izquierda con un cuchillo de fruta…

'¡Zachary Connor! Una vez recibí una puñalada por él. También soporté las humillaciones y vergüenzas de Annalita solo por estar con él. Incluso estuve dispuesta a permitir que mi cuerpo perfecto se sometiera a un procedimiento de fecundación in vitro para poder concebir un hijo con él… He hecho tantas cosas que antes ni siquiera me atrevía a imaginar para reconciliarme con él'.

'Sin embargo, ¡realmente eligió quedarse con su amada Charlotte cuando más necesitaba su cuidado y atención!'.

'¿¡Cómo puede ser tan cruel conmigo!?'. El cuerpo de Lorraine estaba temblando y las lágrimas empezaron a rodar por sus mejillas.

“¡Lory! ¿El doctor no te dijo que no puedes mojar la herida antes de que sane? ¿¡Por qué lloras de nuevo!?”. Jebediah tomó apresuradamente unos hisopos de algodón y los colocó debajo del ojo izquierdo de Lorraine.

Los ojos de Lorraine estaban fijos en la puerta de la sala. “Ellas no me dejaron verme en el espejo. Le pregunté al doctor qué tan grave era mi herida y solo me dieron información vaga. Se negaron a decirme la verdad. Jebediah, ¿qué te parece? ¿Mi cara está arruinada? ¿Crees que es insalvable?”.

“Lory, deja de decir tonterías. El doctor me dijo que tu rostro quedará más hermoso que antes”. Jebediah sintió oleadas de dolor golpeando la pared de su corazón.

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