Resumo do capítulo Capítulo 584 No soy tu saco de boxeo personal do livro Amor Adictivo de CEO de Internet
Descubra os acontecimentos mais importantes de Capítulo 584 No soy tu saco de boxeo personal, um capítulo repleto de surpresas no consagrado romance Amor Adictivo de CEO. Com a escrita envolvente de Internet, esta obra-prima do gênero Romance continua a emocionar e surpreender a cada página.
'¡Zachary! ¡Su enfermedad de los celos no es algo trivial! ¡Y Lorraine suele ser la causa principal de su enfermedad! Solo se enferma cuando la ve…'.
'Él debe haber ido a ver a Lorraine hoy. Por eso ha estado actuando de manera tan extraña'.
El corazón de Charlotte de repente se sintió apuñalado ante ese pensamiento. Ella ya no tenía miedo, se rio irónicamente. “¡Ja! Me conmovió, ¿y que tiene? Solo di lo que quieras decir. ¡No es necesario que te reprimas y dañes tu salud en el proceso!”.
En ese momento, ella sintió que el cuerpo alto de Zachary estaba temblando.
Sus ojos se volvieron aún más fríos, como si la estuvieran golpeando con olas de ráfagas heladas.
Sin embargo, ella no tenía miedo. Ella levantó el rostro con orgullo, lanzó una sonrisa por las comisuras de los labios y lo miró sin pestañear como si ya estuviera muerta. ¡Incluso había un rastro de desprecio en sus ojos!
'¿Qué más puede hacer? Que suceda lo que tenga que suceder, lo volveré loco y me estrangulará hasta la muerte. ¡No me importa! ¡Quiero ver cómo puede enojarse conmigo!'.
“Has admitido que estás conmovida, tú… Ni siquiera te molestas en esconder tus emociones…”. Zachary, que era tan decidido como un rey, habló con voz temblorosa como si llorara sangre. “Entonces, te unirás al elenco y filmarás con él, así que… te deseo felicidad y…”.
“Pfff”. Charlotte casi se empieza a reír.
Ella escuchó que los dientes de Zachary rechinaban unos contra otros y vio que su rostro, que parecía tan frío como un glaciar, se resquebrajaba y las emociones brotaban de la fisura.
Charlotte nunca había visto a Zachary en un estado tan aterrador. Sin embargo, los celos la habían deslumbrado. Ella se sentía indomable en este momento, por lo que no tenía miedo. En cambio, ella sonrió y lo miró. “Zachary, siempre puedes echarme la culpa mientras tengas ganas de hacerlo, ¡así que di lo que quieras decir! Sí, quiero filmar con Zenios y quiero ser feliz con él”.
¡Esta era la primera vez que escuchaba gritar a Zachary!
“Yo…”. Charlotte quería explicar que no lo hizo a propósito. Ese movimiento era un movimiento que solía usar cuando se enfrentaba a un hombre más fuerte y más alto que ella. Había pensado que Zachary la iba a golpear, así que no dudó y…
Sin embargo, pensando en la mirada melancólica y apesadumbrada de Zachary, no se molestó en explicarse. Ella mantuvo la cabeza en alto y se rio. “Zachary, tú te lo buscaste. Espero que esto te despierte. No soy tu saco de boxeo personal. Puede que te pongas celoso de Lorraine en el futuro, pero eso no te da derecho a desahogarte conmigo”.
Zachary tenía dificultad para respirar; el dolor, la pérdida y la confusión brillaban en sus ojos…
Charlotte temía que Zachary la atacara después de salir de su trance. Por lo tanto, ella no se atrevió a quedarse. Se dio la vuelta y subió las escaleras al instante.
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