Resumo do capítulo Capítulo 1330 Siempre estaré a tu lado de Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma
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Después de conversar, la pareja de padre e hijo se paseó por el exterior. Cuando volvieron a casa, Tiantian se había ido a la cama.
Jiang Sese sonrió y preguntó: “¿Dónde fueron ustedes?”.
“Es un secreto”, dijo Xiaobao, antes de salir corriendo hacia su habitación.
Jiang Sese se rio sin poder evitarlo y miró a Jin Fengchen con las cejas arqueadas: “¿No me lo vas a contar tampoco?”.
“Estábamos paseando afuera”. Jin Fengchen respondió con sinceridad.
“¿Paseando?”. Jiang Sese sintió una ligera curiosidad.
“Sí, Xiaobao me habló del pasado, pero...”. Jin Fengchen suspiró: “Todavía no recuerdo nada”.
Jiang Sese sonrió ligeramente: “Está bien, no tengo prisa, y tampoco Xiaobao y Tiantian. Mientras estés a nuestro lado, es suficiente”.
Al decir eso, se acercó para abrazarlo por la cintura y enterrar su cabeza en su pecho mientras decía suavemente: “Aunque nunca lo recuerdes, está bien”.
Mientras él estuviera a su lado, se sentía segura.
Jin Fengchen la abrazó con fuerza, con su bello rostro lleno de pesar.
Era porque así se sentía ella que él más necesitaba recuperar sus recuerdos.
...
Al día siguiente, Tiantian se levantó temprano. Entró corriendo en la habitación de Jiang Sese y Jin Fengchen.
“Papi, mami, ya salió el sol. Despiértense”.
Jiang Sese y Jin Fengchen se despertaron, y ambos se sentaron en la cama y miraron a Tiantian con impotencia.
“¿Por qué te levantaste tan temprano?”, preguntó Jiang Sese.
“Mami, ¿no dijimos ayer que hoy íbamos a ir de pícnic?”. Dijo Tiantian con dulzura.
Jiang Sese se rio con exasperación: “Aún así no es necesario salir tan temprano”.
“¡Pero tenemos que hacer bolas de arroz!”.
Jiang Sese bostezó y dijo comprometida: “Bien, baja y espérame, ¿está bien?”.
“De acuerdo”. Tiantian salió obedientemente, e incluso cerró la puerta por consideración.
Jiang Sese se giró para mirar a Jin Fengchen y él vio que todavía tenía sueño. Él le dijo: “Duerme un poco más, yo me levantaré primero”.
“Está bien”.
Sin esperar a que ella respondiera, Jin Fengchen apartó inmediatamente las sábanas y se puso las pantuflas para entrar en el baño.
Jiang Sese se rio y también se levantó de la cama. Se acercó a la ventana y corrió las cortinas para que entrara el sol de la mañana.
Al contemplar el hermoso día que hacía fuera, la sonrisa de Jiang Sese se intensificó y no pudo evitar exclamar: “Qué buen tiempo hace”.
El tiempo había sido estupendo desde que llegaron a Francia, y eso la hacía sentirse mucho más a gusto.
Respiró profundamente y se dio la vuelta para marcharse.
Cuando bajó las escaleras, vio a Tiantian jugando en el salón.
Se quedó allí en silencio un rato, antes de entrar en la cocina.
Cuando terminó de desayunar, Jin Fengchen y Xiaobao bajaron.
“¿Por qué tardaron tanto?”, preguntó Jiang Sese mientras les servía un vaso de leche.
“Uno de mis modelos no estaba bien hecho, así que Papi me ayudó”, respondió Xiaobao mientras se sentaba.
Jiang Sese sonrió: “¿No es maravilloso tener a Papi cerca?”.
“¡Sí!”.
Xiaobao y Tiantian respondieron al unísono.
Cuando todos estaban sentados para desayunar, Jiang Sese se quitó el delantal: “Voy a subir un momento, pueden comer primero”.
Mientras subía, Xiaobao dijo en voz baja: “Papo, ¿de verdad no te acuerdas de nada?”.
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