Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1385

“No hay nada que puedas hacer, pero yo sí”. La anciana exclamó enfadada: “Iré a reunirme con Jin Fengchen y le pediré que deje ir a Yuanyuan”.

Shangguan Qian no esperaba que ese fuera su plan.

Ir a ver a Jin Fengchen ahora no tendría ningún efecto.

“Abuela, no tienes que atormentarse. La promesa de la familia Jin de retirar los cargos será su mayor concesión”, persuadió Shangguan Qian.

“¿La mayor concesión?”. La anciana resopló fríamente: “¡Son unos malagradecidos! Si Yuanyuan no hubiera salvado a Jin Fengchen, ¿podría reunirse su familia?”.

“Abuela, estás citando mal los hechos”.

Aunque se trataba de su abuela, Shangguan Qian no podía soportarlo más.

“¿Quién está citando mal los hechos?”, preguntó la anciana bruscamente.

“Efectivamente, fue Yuanyuan quien rescató a Jin Fengchen al principio, pero también le hizo perder sus recuerdos, lo escondió e impidió que volviera a casa y se reuniera con su familia”.

“¡No me importa, la familia Jin es malagradecida!”.

La Vieja Señora comenzó entonces a volverse irracional e insistió en que quería ver a Jin Fengchen.

Ante tal dolor de cabeza, Shangguan Qian tuvo la noción de escapar.

Sin embargo, esta noción fue rápidamente extinguida por él.

Respiró profundamente, reprimió la irritabilidad de su corazón y continuó persuadiéndola con paciencia: “Abuela, si te reúnes con los Jin ahora y los ofendes, ¿qué haremos si deciden presentar cargos contra Yuanyuan nuevamente?”.

Shangguan Qian sabía muy bien que Jin Fengchen era una persona de confianza. Ya que había accedido a retirar los cargos, lo haría. No volvería a presentar cargos.

Lo dijo solo para que la Vieja Señora abandonara la idea de ir a ver a Jin Fengchen.

“Además, el abuelo materno de Jin Fengchen tampoco es alguien que la gente común pueda enfrentarse. Si se ofenden e intervienen, Yuanyuan no se libraría simplemente con unos años de cárcel”.

Después de escuchar las palabras de Shangguan Qian, la Vieja Señora se calmó un poco, pero todavía lo reprendió descontenta.

“¡Eres un nieto poco filial e incluso no estás dispuesto a salvar a tu hermana! ¡Si le pasa algo a Yuanyuan, no quiero seguir viviendo!”.

La anciana se golpeó el pecho y empezó a llorar.

Shangguan Qian se limitó a quedarse parado y a mirarla fijamente.

Para ser sinceros, debido al incidente con Shangguan Yuan, Shangguan Qian sentía una sensación de agotamiento e impotencia sin precedentes.

Si no fuera su hermana, realmente no querría preocuparse por nada de esto.

Las cosas se agravaron hasta este punto, y para ser francos, Yuanyuan solo podía culparse a sí misma.

Shangguan Qian sonrió amargamente y dijo con frialdad: “Abuela, todo el mundo está cansado por este incidente con Yuanyuan. Hice todo lo posible para salvar a Yuanyuan, pero ahora no tengo más opciones. Por favor, perdóname, y por favor, perdónate a ti misma, Abuela”.

La Vieja Señora dejó de llorar. Abrió mucho sus ojos rojos y lo miró incrédula: “Pequeño Qian, ¿sabes lo que estás diciendo?”.

“Abuela, solo lo dije después de pensarlo detenidamente”.

“Pequeño Qian, si nos rendimos, tu hermana tendrá que sufrir”. Después de todo, la Vieja Señora no quería ver sufrir a su nieta.

Shangguan Qian desvió la mirada: “Ella debería tomar esto como una lección para aprender de sus errores”.

“¡Shangguan Qian!”. La Vieja Señora entró en pánico. Ella sabía que tan pronto como se rindiera, no habría nadie para salvar a Shangguan Yuan.

“Abuela...”.

Shangguan Qian todavía quería persuadirla, pero en ese momento, el mayordomo se apresuró y dijo: “Joven Amo, tiene invitados”.

“¿Invitados?”. Shangguan Qian frunció el ceño.

En este momento, ¿por qué había alguien todavía dispuesto a visitar la residencia Shangguan?

“Abuela, por favor, mantén la calma y piensa en ello. Hablaré contigo más tarde”.

Shangguan Qian se dio la vuelta y salió.

Cuando bajó las escaleras, vio al hombre sentado en la sala de estar.

Un hombre desconocido.

Shangguan Qian se puso en guardia y se acercó lentamente.

Cuando la otra parte lo vio, se puso inmediatamente de pie, con una sonrisa en su rostro.

“¿Tú eres?”. Shangguan Qian lo miró con desconfianza.

“Hola, Hermano Mayor. Soy un compañero de clase de Yuanyuan, Jiang Cheng”.

Era Jiang Cheng, que acababa de llegar de la Ciudad Jin.

Estaba desesperado y aceptaría cualquier ayuda que pudiera obtener.

...

Mientras tanto, en la residencia Jin.

“Joven Amo, alguien fue a visitar a Shangguan Yuan”, Gu Nian comunicó a Jin Fengchen la información que acababa de recibir.

Jin Fengchen ni siquiera pestañeó y dijo con indiferencia: “No le prestes atención”.

Lo más probable es que cualquiera que visitara Shangguan Yuan intentara rescatarla.

Sin embargo, contra la familia Jin y la familia Fang, no es tan sencillo para la familia Shangguan salvarla.

“¿Hay alguna novedad respecto a lo que te pedí que investigaras?”, preguntó Jin Fengchen.

Gu Nian frunció el ceño: “Notamos a algunas personas sospechosas, pero cuando íbamos a investigar más, parecían habernos descubierto”.

Esto implicaba que había contratiempos en la investigación.

Jin Fengchen permaneció inexpresivo y no se podía saber lo que estaba pensando.

Gu Nian sintió un aura de opresión y rápidamente bajó la cabeza: “No se preocupe, Joven Amo. Concluiremos el asunto lo antes posible”.

“Gu Nian, creo en tus habilidades, y espero que haya resultados pronto”.

Había una pizca de frialdad en su profunda voz.

Gu Nian respondió apresuradamente: “Sí”.

Se dio la vuelta para marcharse.

A mitad de camino, de repente pensó en algo y se detuvo. Se dio la vuelta y miró a Jin Fengchen.

“Joven Amo, antes de que hayamos investigado este asunto con claridad, será mejor que no deje que la Joven Señora ande sola para evitar problemas”.

Jin Fengchen asintió: “De acuerdo. Asigna algunos hombres más para protegerla en secreto”.

“Sí”.

Gu Nian se marchó a toda prisa tras recibir la orden.