Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 55

Jiang Sese se veía sumamente nerviosa. Estaba preocupada de que Su Shan la hubiera visto con Jin Fengchen abrazándola fuera del edificio hace unos minutos.

Su Shan inclinó la cabeza sin decirle nada, pero había un indicio inconfundible de sospecha en su mirada.

"Está bien, entonces,” murmuró sospechosamente, "¡Pero avísame si no te sientes bien! ¡No quiero que trabajes si debes estar en cama!"

Su Shan seguro que sabía cómo agradarle a alguien, ¡más si se trataba de alguien apegado al jefe!

"Errr... Está bien. Gracias, Gerente,” dijo Jiang Sese con una sonrisa.

Ella esperó hasta que Su Shan desapareciera por la esquina y seleccionó una carpeta de su bandeja de entrada, tratando de mantener su mente alejada de lo que sucedió mientras se concentraba en el trabajo.

...

El día pasó rápidamente. Jiang Sese se detuvo a mitad de su camino a casa para comprar algunas verduras. Apenas había llegado a casa cuando sonó el timbre.

Y quién más sería si no Xiaobao, quien estaba allí para cenar.

"¡Xiaobao está aquí, Tía Sese!"

"¡Entra!" Jiang Sese se rió entre dientes. Pero se detuvo, recordando algo y le preguntó a Xiaobao: "¿Cómo llegaste aquí, Xiaobao?"

"¿Puede ser posible que Jin Fengchen esté abajo, esperando como el otro día?"

Xiaobao le lanzó una mirada extraña, parpadeando con fuerza antes de murmurar rápidamente: "¡Claro que fue el Tío Chofer!"

Pero Jiang Sese sabía la verdad; el pequeño niño astuto debía estar mintiendo. Pero ella simplemente se tomó a la ligera la mentira con una risa.

"¿Qué pasa, Tía Sese? ¿Por qué preguntas sobre eso?"

"¿No es posible que la Tía Sese se haya dado cuenta de que fue papá quien me trajo aquí, verdad?"

"Bueno, ya casi es hora de cenar. Estoy segura de que el Tío Chófer aún no ha comido todavía. Deberíamos llamarlo para que coma algo también.”

"¡¿Ah?!" Xiaobao jadeó en voz alta, sus ojos tan abiertos que parecían dos tazas de té, luciendo extremadamente nervioso.

"¿Qué debería hacer?” se preguntó con aprensión.

"¡Es Papá abajo, no el Tío Chofer!"

"¿Invitaría a cenar la Tía Sese a Papá? Bueno, con tal de que yo tenga algo de comer, ¡supongo que lo demás no importa ahora!"

Un Xiaobao acorralado murmuró en voz baja: "Está bien.”

Jiang Sese bajó las escaleras con Xiaobao, caminaron al carro y ella tocó la ventana del Maybach.

Jin Fengchen abrió la puerta de su carro, su guapo rostro lucía tan genial sin apenas un rastro de pena.

"La Tía Sese le gustaría invitar al Tío Chofer para que venga a cenar con nosotros, Papá.”

"¡Bueno, no es mi culpa que la Tía Sese haya adivinado correctamente que Papá está aquí! ¡Yo no traicioné a papá!"

Jiang Sese soltó una sonrisa presuntuosa. Ella tenía razón al suponer que Xiaobao fue traído por el mismo Jin Fengchen.

"¡Sube! No te quedes en el auto."

Los bordes de los labios de Jin Fengchen se movieron. "Entonces, tendré cena después de todo."

El trío subió las escaleras. "Siéntate en la sala,” dijo Jiang Sese, "Cocinaré.”

"Déjame ayudarte,” dijo Jin Fengchen de inmediato.

"¡Yo también! ¡Yo también quiero ayudar, Tía Sese!" Xiaobao agregó.

Jiang Sese no pudo encontrar alguna razón para objetar y fueron juntos a la cocina.

Jin Fengchen se enrolló las mangas y comenzó a enjuagar las verduras.

Era la primera vez que Jiang Sese lo veía en la cocina. Todo el tiempo, ella lo estaba estudiando. "¡Cómo diablos puede un hombre verse tan hermoso! ¡Incluso puede modelar para un póster!"

Xiaobao también merodeaba, tratando de ayudar con todo lo que podía.

Era un espectáculo que habría dejado a los abuelos de Xiaobao y a Jin Fengyao desconcertados. "¿¡Desde cuándo esta pareja de padre e hijo sabe cocinar!?"

De alguna manera, la cena estuvo lista en poco tiempo. Todo gracias a la ayuda de la pareja de padre e hijo y Jiang Sese. Al poco tiempo, todos se sentaron alrededor de la mesa del comedor, listos para disfrutar de la comida que habían preparado juntos.

El apartamento de Jiang Sese era modesto y estrecho, pero en ese mismo momento estaba repleto de calidez, vida y amor.

Era especialmente surreal para Jiang Sese, que se había acostumbrado tanto a una vida solitaria en su apartamento después de estar soltera durante muchos años.

Y la palabra "familia" apareció de repente en su mente.