Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 64

Lan Sichen se levantó repentinamente y comenzó a repartir varias copias de un documento a todos. A primera vista, resultó ser un documento corporativo.

“¡El Grupo Disen!” Jiang Zhen suspiró con sorpresa.

“Sí. ¡Estoy seguro de que han escuchado de ellos, Padre y Tío! Esta es una corporación internacional con aspiraciones de adentrarse en mercados internacionales. Sus compañías subsidiarias de tecnología son destacadas en Europa. Estoy seguro de que, si podemos incorporarlos en este proyecto, podremos compensar por las pérdidas incurridas antes".

“Eso sería bueno".

Todos sentados en unos sofás ordenados en un círculo tuvieron una sensación de alivio. Jiang Nuannuan sonrió, satisfecha con su decisión de poner su fe en Lan Sichen, estaba segura de que él se aseguraría de prevenir más daños.

Pero Lan Sichen permaneció con la cara seria.

“Pero, hay un inconveniente… Esto será una ardua batalla entre competidores por su colaboración; el Grupo Jin entre ellos…”.

Las noticias inquietantes hicieron que todos se congelaran mientras contemplaban silenciosamente, “¿Entonces tendremos que competir contra el Grupo Jin?”.

El Grupo Jin tenía varios acuerdos en otros innumerables campos y una fuerza superior a la de los Jiangs y Lans combinados. Adicionalmente, Jin Fengchen se había ganado una reputación de ser feroz y despiadado en el campo de batalla de negocios. Muy pocos de sus contrincantes habían emergido ilesos de sus conflictos contra él. Cualquier otro hubiera acordado a pararse de su lado en vez de en su contra. “¿Pero cómo? ¿Cómo podríamos dejar nuestra única oportunidad para recuperarnos?”.

“Esto será todo o nada para todos nosotros. Si perdemos esta oportunidad a los Jins, nuestras familias caerán en un infinito abismo de deudas e incertidumbre fiscal".

“Sichen,” dijo Jiang Zhen repentinamente mirándolo fijamente, “¿tienes un plan, cierto?”.

Él estaba seguro de que Lan Sichen tendría un plan para derrotar al Grupo Jin, ya que había sugerido trabajar con el Grupo Disen.

Vio un breve sentimiento de resentimiento en los ojos de Lan Sichen, mientras las esquinas de su boca se contraían vorazmente, así como un lobo hambriento. En un tono firme, sereno, él dijo “Jiang Sese continúa siendo nuestro objetivo".

Esta era una declaración que nadie esperaba escuchar.

“Los hermanos Jin tomaron un gran interés en ella. Qianqian incluso me dijo hace unos días que ella había acompañado al pequeño Jin a un evento del jardín de niños. Incluso el niño parece estar muy encariñado de ella. Ella es su talón de Aquiles. Si nos enfocamos en ella incluso el gran y poderoso Grupo Jin caerá a nuestros pies".

Era indispensable para los Jiangs y Lans establecer una conexión con el Grupo Disen. La abrumadora fuerza del Grupo Disen no era una que ni el Grupo Jin podía tomar a la ligera y no tendrían que temerles al Grupo Jin si el plan era exitoso.

Las cabezas comenzaron a asentir alrededor del círculo.

Sin embargo, Jiang Nuannuan permaneció insatisfecha. “¿Pero por qué Jiang Sese de nuevo? ¿Ustedes no se han dado cuenta cuánto dolor y daño nos ha causado su regreso?”

“¿Por qué, de todas las personas, Jin Fengchen tuvo que enamorarse de ella?” Celos y odio estaban retratados en sus ojos.

Jiang Nuannuan y Lan Sichen salieron juntos de la reunión.

Un chofer estaba detrás del volante. Después de todo, Lan Sichen no podía manejar con su brazo lastimado.

“¿Cuales son las probabilidades de conseguir que el Grupo Disen se asocie con nosotros, Hermano Sichen?” Jiang Nuannuan preguntó, su voz estaba llena de preocupación.

“Estoy seguro de que podemos".

Sus ojos brillaban con determinación, él lo lograría o moriría en el intento.

Sus ojos recorrieron su brazo lastimado y un velo de acritud pasó sobre él.

“Incluso Aquiles tenía una debilidad”, pensó, “y yo, Lan Sichen, ¡tendré mi venganza!”

…

Una indiferente Jiang Sese no tenía idea que había un blanco estampado sobre ella. Ella estaba a punto de partir a casa después del trabajo cuando salió de su oficina y vio a Jin Fengchen y Xiaobao. No los había visto en varios días.

Estaba llena de asombro hasta que sus pasos se detuvieron y Xiaobao se lanzó hacia ella y la atrapó en un abrazo volador.

“¡Tía Sese! ¡Ha pasado tanto tiempo! ¡Xiaobao te extraña mucho!”

La voz suave del pequeño le derritió el corazón y se preparó para todas las emociones que despertó en ella. “¡Y ella también lo extrañaba mucho a él!”

Jiang Sese se agachó y le preguntó a Xiaobao, “¿por qué han venido?”

Xiaobao estaba emocionado por poder verla.