Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 705

Al oír la sospecha en su tono, Zi Feng respondió con calma: "Ya lo he decidido".

Bo Gelian no se comprometió y preguntó: "He oído que Jin Fengchen te tiene en gran estima...".

Sin embargo, Zi Feng pareció no querer sacar el tema, así que lo interrumpió: "Eso era antes. Ahora solo soy una fugitiva que lo ha traicionado".

Ella hizo una pausa y luego continuó: "Es más, lo que Jin Fengchen valora no soy yo, sino mis habilidades. Él trataría a otros de la misma manera".

Por lo tanto, ella no era nada especial.

Una vez pensó que ella era única, pero se sintió profundamente herida por ello y se arrepintió abrupta y completamente.

Bo Gelian la miró pensativo.

Después de un rato, el hombre sonrió y dijo: "Una sabia elección. No hay nadie más en el mundo que se atreva a albergarte, excepto yo".

"Gracias, Señor Bo Gelian. Puedes estar segura de que la gente y las cosas del pasado ya no me preocupan. ¡Ahora, solo quiero vengarme de Jin Fengchen!".

Lo mucho que ella lo amaba entonces era lo mucho que lo odiaba en ese momento con todo su corazón.

Al decir esto, Zi Feng no hizo ningún esfuerzo por ocultar su odio.

Bo Gelian la observó durante mucho tiempo. "Entonces, vámonos".

Como Jin Fengchen estaba enfurecido, Bo Gelian tenía la intención de llevar a Zi Feng a una isla y esconderse.

Cuando el coche entró a toda velocidad en la autopista, el conductor exclamó de repente: "¡Alguien nos persigue!".

Bo Gelian miró por el espejo retrovisor. Efectivamente, un Hummer se dirigía a toda velocidad hacia ellos.

Llegó muy pronto. Jin Fengchen actuó, en efecto, con tanta decisión y rapidez como decían los rumores.

El Hummer avanzaba increíblemente rápido. Con su velocidad, los alcanzaría muy pronto.

Bo Gelian reflexionó y luego dijo con firmeza: "Acelera. ¡Piérdanlos!".

Al percibir el movimiento de Bo Gelian, Ying Tian golpeó su asiento y dijo: "Ya nos descubrieron. Date prisa, alcánzalos".

El conductor, que también era su camarada, se mostró muy molesto con él.

He Shuhan interrumpió: "Ya casi llegamos. No influyas en la conducción de Gangzi".

Ying Tian obedeció durante un rato, pero no pudo evitar volver a dar órdenes.

"¡Choca! ¡Embiste contra ellos! ¡El coche de Bo Gelian no es más rápido que el nuestro!".

Todavía había más de diez metros entre ellos, así que a menos que pudieran volar de repente, no podrían embestirlos.

Al ver el coche justo delante de él, pero que seguía fuera de su alcance, Ying Tian se llenó de impaciencia. Le preguntó a He Shuhan: "¿A dónde lleva este camino?".

He Shuhan respondió con calma: "A la playa".

"M*erda, realmente está huyendo. Qué cobarde. Si se enfrentara a nosotros de frente, aún le respetaría como hombre. ¡No esperaba que fuera tan cobarde!".

He Shuhan le ignoró, miró a Gangzi y dijo con voz grave: "¡Gangzi, detenlos!".

Gangzi asintió, luego pisó el acelerador y giró el volante. Los dos coches chocaron entre sí.

Bo Gelian conducía un Mercedes-Benz a prueba de balas que él mismo había modificado. Su rendimiento era mejor que el de un coche normal.

Incluso después de ser embestido por el Hummer, solo se sacudió violentamente, pero no se volcó.

Dentro del coche, Bo Gelian se golpeó la cabeza contra el parabrisas, lo que le hizo ver estrellas.

A Zi Feng no le fue mejor. La sacudida le hizo vomitar la comida de la noche.

Cuando ella volvió en sí, sintió una mirada deslizante sobre su cuerpo.

Se sorprendió y levantó la vista, solo para ver a Bo Gelian mirando con indiferencia.

Ella se sintió inefablemente incómoda.

El Benz estaba prácticamente ileso, pero el conductor estaba un poco mareado y conducía torcido.

Afortunadamente, el muelle estaba justo delante.

Desde la ventana, Ying Tian vio el mar azul donde estaba amarrado un yate y dijo con ansiedad: "No podemos dejar que suban al yate".