Castigado por su amor romance Capítulo 1287

Su rostro se enrojeció al instante y luego se volvió pálido de nuevo en un segundo.

En ese momento, Sebastian también abrió la boca. “Señorita Gibson, si desde el principio hubieras venido a mi oficina con un escote tan bajo, mi recepcionista no te hubiera dejado entrar”.

En ese momento, la recepcionista de repente notó la piel blanca como la nieve del cuello de Lori. La señaló bruscamente.

“¿Por qué… Por qué te cambiaste?”

Sabrina se rio con frialdad.

“Ella no se cambió, solo se veía conservadora cuando entró al haberse tapado el pecho con una bufanda. Y ahora la razón por la que está exponiendo una gran parte de su pecho que no debería estar expuesta es porque se quitó la bufanda y la usó como un lazo en la cabeza”.

La recepcionista abrió mucho los ojos y miró a Lori. “Tú… Tú, ¡cómo puedes hacer esto! No me extraña que la Señora Directora haya venido a exponerte personalmente. ¡Una z*rra como tú debería desfilar por las calles para mostrarles a todos qué tipo de mujer eres en realidad!”.

“¡Pah!”. Alguien incluso escupió en el rostro de Lori. En ese momento, a Lori no podía importarle menos. Ya estaba en un punto tan bajo; era mejor luchar un poco. “Yo… ¡Qué hice! Le estaba mostrando al Director la carta de intención y me preocupaba que mi cabello estorbara, así que me quité la bufanda y la usé para atarme el cabello. ¡Todo eso porque tenía que explicarle las anotaciones!”.

“Siempre he sido fría y arrogante; ¡nunca haría algo tan furtivo como esto! Debo vengarme de la humillación que he sufrido hoy. De lo contrario, ¡preferiría morir aquí!”, dijo Lori con lágrimas en los ojos.

En ese momento, Sabrina se rio con frialdad.

“Señorita Gibson, ¿por qué insiste en hacerme exponer tus verdaderas intenciones?”.

“¿De qué estás hablando? ¿Qué quieres decir con mis ‘verdaderas intenciones’?”, preguntó Lori.

Sabrina continuó: “Por desgracia, el hombre propone, pero Dios dispone. Tu personalidad inventada te pareció extraordinariamente perfecta, pero a mis ojos era extremadamente inferior. Fui muy amable contigo porque estaba esperando que te expusieras. Como esperaba, actuaste muy rápido”.

“¡Lori Gibson, trataste de robarle el esposo a otra persona! ¡Tomas a todos los demás por tontos! ¡Crees que tu plan es a prueba de tontos! Pero, de hecho, ¡está plagado de agujeros! ¡Eres tan fea como un payaso!”. Sabrina reprendió a Lori sin piedad.

Lori estaba tan avergonzada que no podía pronunciar ni una sola palabra. Por desgracia, este era el destino del perdedor.

Sabrina no se molestó en mirar a Lori ni un segundo más, solo le dijo a Sebastian: “Sebastian, trata con ella como mejor te parezca”.

Sebastian dijo fría y rápidamente: “¡Échenla!”.