Castigado por su amor romance Capítulo 1565

Todos los hombres miraban con miedo al hombre de pie detrás del que golpeaba a Huron. El vestía una chaqueta impermeable azul marino y parecía tan poderoso como un rey. El hombre todopoderoso estaba en cuclillas frente a la mujer que parecía un perro, sus manos grandes y limpias tocaban sus muñecas sucias y encadenadas.

"¿Qué te parece, Alex? ¿Es... es esto lo suficientemente divertido para ti?". Jane retrajo sus brazos encadenados abruptamente. Su expresión permanecía en blanco, sin signos de lágrimas en sus ojos. Ella miró a Alex mientras continuaba diciendo en un tono tan tranquilo, como si estuviera discutiendo asuntos ajenos a ella. "Yo... tú probablemente nunca imaginarías que, en una sociedad civilizada, los humanos aún serían tratados de esta manera, ¿verdad? Sin embargo, ya me acostumbré. Desde pequeña, todos mis hermanos tenían sus camas y habitaciones, mientras que yo tenía que dormir en el pasillo. Cuando no se les ocurría ningún juego interesante, me amarraban y me obligaban a ladrar como un perro en el piso. Pero en ese momento, nunca imaginé que algún día, de hecho, sería encadenada como un perro y me llevarían a ti así. ¿Es esta... tu nueva forma de divertirte? No sé... si esto es lo suficientemente estimulante para ti". Miró indiferente a Alex.

"Jane…", dijo Alex con una voz ronca. "Lo siento, Jane. Lo siento, es mi culpa. Llegué muy tarde". Entonces abrazó a Jane.

El costoso abrigo de Alex contrastaba con la mujer sucia y desaliñada con cadenas en las muñecas y el cuello, pero sin importar eso, la abrazó con fuerza, y en el momento en que lo hizo, las lágrimas comenzaron a caer de sus ojos. "Jane, nunca había sentido tanto miedo. Estuve en guerras y experimenté todo tipo de circunstancias peligrosas, pero nunca había estado tan asustado. He estado así durante las últimas dos semanas. Tenía tanto miedo de no volver a verte nunca más, de que fuéramos separados por la muerte. Por suerte, aún estás viva, Jane. Mientras estés viva, no estaré soñando. No estoy soñando. Finalmente te encontré de nuevo, Jane. Escucho tu voz y te tengo entre mis brazos. Esto no es un sueño, y todavía estás viva...".

Para Alex era imposible describir sus sentimientos con palabras en ese momento. Emoción. Sentimental. Ninguna de esas palabras lo describiría. Sentía que estaba en una situación en la que su vida pendía de un hilo y logró soportarlo y sobrevivir. Se sentía aún más emocionado que escapar del peligro él mismo. Sostuvo a Jane, quien todavía estaba aturdida, en sus brazos y le ordenó a Garrett: "¡Toma las herramientas y corta las cadenas del cuerpo de Jane!".

En ese momento, Garrett se dirigió hacia Alex con un par de alicates que le trajeron los subordinados de Huron. Cuando Garrett pasó junto a Huron, estuvo a punto de golpearlo con las tenazas, pero sabía que cortar las cadenas de Jane era lo más importante.

Rápidamente, logró quitarle las cadenas a Jane con los alicates.

"Está bien, Jane. Está bien ahora". Alex tocó a Jane suavemente en la espalda y dijo con determinación: "No sufrirás más a partir de ahora. Ven, vámonos a casa. Ven a casa conmigo, Jane".

Jane lo miró sin comprender. "Alex, ¿qué nuevo juego planeas usar conmigo ahora?".