Castigado por su amor romance Capítulo 973

[¡Bien! No es que no me atreva, simplemente no quiero hacerlo].

[Así que, querido primo, será mejor que me digas si Sabrina está en peligro.]

Kingston respondió: [Si es así, ¿qué planeas hacer?].

[Si el Viejo Shaw se atreve a acusar e incriminar a Sabrina nuevamente, ¡Ruth y yo lo mataremos! ¡No me importa de quién sea abuelo!].

Kingston suspiró ante el mensaje de Yvonne.

Ella continuó: [No pudimos hacerle nada a la familia Lynn cuando estaban en Isla Estrella. Pero ahora que regresaron, aunque Sabrina y Sebastian no pueden hacer nada, ¡Ruth y yo sí! ¡Haremos todo lo posible para que tengan una muerte horrible!].

Kingston contestó a su mensaje.

[No se preocupen, por el fuerte vínculo de amistad que comparten Ruth, Sabrina y tú, el Amo Sebastian y Sabrina nunca permitirían que ustedes, dos niñas, arriesguen sus vidas. No te preocupes, el Amo Sebastian no permitirá que Sabrina sufra ningún daño, ni dejará que sus enemigos se escapen tan fácilmente. Ruth y tú pueden divertirse y pasar el rato. Cuando salgan, ambas pueden unirse a Aino y Sabrina, y ahora que la esposa de Alex también se unió a ustedes, las cinco pueden pasar tiempo comiendo o comprando juntas. Eso sería lo mejor].

Yvonne respondió de inmediato con una cadena de emoticones sonrientes.

[Jajaja, para ser honesta contigo, Kingston, me encanta ir de compras con Sabrina y Jane. ¡Me compran mucha ropa bonita! ¡Ni siquiera tengo que gastar mi dinero! Y por la tarde, puedo comer mi comida favorita para el almuerzo. No solo eso, incluso peleó la comida con Aino, jaja].

Kingston tuvo que reír.

[¡Glotona! Te olvidas de todo lo demás apenas mencionan la comida].

[Entonces, Kingston, ya que el Señor Lynch y Sabrina están hablando con el Viejo Amo Shaw adentro, Aino no debe quedarse allí con ellos. Tráela para pasar un rato con ella. Ruth y yo no la hemos visto en dos semanas, ya la extrañamos].

La pequeña estaba llena de ideas traviesas. Ni siquiera a Kingston se le ocurrían esas ideas para torturar a sus enemigos. Y, sin embargo, la pequeña había pensado en ello. Kingston se rio. “¡Niña traviesa! ¡Eres la pequeña perfecta protectora de tu madre! Pero me temo que a ella le dolerá el corazón si atrapamos al anciano de la familia Lynn”.

"¿A mi mami le dolerá el corazón por ese anciano?", preguntó Aino. "¿Cómo es eso posible?".

Kingston se rio otra vez. “Si tu madre fuera acosada, ¿te dolería el corazón por ella?”.

Aino asintió. "¡Claro que sí!".

“Es algo similar…”, respondió Kingston.

"Entonces, ¿estás diciendo... que ese viejo es mi... el papá de mi Mami?", preguntó Aino.