Después de la Enfermedad, Renació el Amor romance Capítulo 42

De repente, Ximena se asustó.

Se apartó rápidamente.

Desde atrás, se escuchó la voz apresurada de una joven: —¡Perdón, hermana! Mi dron parece que tiene un fallo, no puedo controlarlo. ¿No te has lastimado?

Ximena se dio la vuelta y vio a una chica de unos cuantos años, vestida con un uniforme de hospital, con una cara de muñeca linda y fresca llena de disculpas.

Ximena negó con la cabeza: —No.

La chica suspiró aliviada: —¡Qué bueno! no sé qué pasó, de repente se descontroló.

Ximena miró el dron frente a ella y le entregó a la chica la caja de dulces que tenía en las manos: —¿Te importaría si te ayudo a revisarlo?

La chica se sorprendió: —¡No me importa!

Tomó los dulces de Ximena y, al ver las galletitas dentro, sus ojos brillaron.

Ximena apagó el dron y lo revisó: —Parece que el fallo está en el sistema de vuelo, no puede seguir la ruta preestablecida. Hay que ver si el giroscopio o el sensor necesitan calibrarse.

La chica la miró con admiración: —¡Hermana, eres increíble!

Ximena hizo algunos ajustes y se lo entregó a la chica: —Debería estar mucho mejor ahora, ¿quieres probarlo?

La chica probó el vuelo, y efectivamente, voló suave como la seda.

—¡María!

Desde atrás, se escuchó la voz urgente de un hombre. Ximena miró hacia un lado y vio a Gabriel corriendo rápidamente, aparentemente preocupado por no haber encontrado a la chica.

María, instintivamente, se escondió detrás de Ximena.

Gabriel se acercó, vio a Ximena y se sorprendió por un momento: —¿Señorita Ximena?

Ximena preguntó: —¿Eres su...?

—Hermano. Gabriel miró a María con alivio,—Es mi hermana. Está enferma y salió a correr, la he estado buscando por mucho tiempo. Gracias.

Ximena negó con la cabeza: —No es nada.

Gabriel notó que Ximena no parecía tener ganas de hablar más, su actitud era respetuosa pero fría.

Él apretó los labios.

De repente, no sabía qué decir.

—¿La hermana es amiga de mi hermano? María vio que se conocían y preguntó con los ojos brillando.

Al escuchar la palabra "amiga", Ximena frunció el ceño instintivamente.

No se podría considerar como tal.

Observando cómo Ximena se alejaba, Gabriel tardó un rato en apartar la mirada.

Solía pensar que Ximena actuaba de manera complaciente con ellos solo para ganarse el favor de Diego. Siempre tan amable y tranquila, sin importar lo mal que pudieran tratarla, Ximena nunca se enojaba.

Pero ahora no era lo mismo.

Ella estaba tan tranquila, pero a la vez se sentía fría y distante.

Parecía que realmente lo detestaba.

—¿Gabriel? —María lo tocó, con expresión curiosa: —¿Por qué no dejas de mirarla?

Gabriel reaccionó y dijo: —Pásame su nombre de Instagram.

...

Cuando Ximena llegó a casa, justo vio la solicitud de Gabriel para agregarla.

Antes, Carlos y Gabriel nunca le habían prestado atención, y mucho menos se habrían molestado en agregarla al Instagram.

Ahora, ¿sería por alguna razón especial?

Ximena no lo pensó demasiado, aceptó la solicitud y se fue a duchar.