Devoción apasionada: la querida esposa del Maestro Fudd romance Capítulo 1061

El primer día del Año Nuevo Lunar.

Ambos bajaron del coche y entraron a la casa.

Heather se sorprendió cuando vio a Shayne. “Shayne, ¿por qué viniste de repente?”.

“¡Estoy aquí para visitarte, Abuela!”.

Heather se rio. “Debe ser difícil para ti venir tan temprano en la mañana. Supongo que debes haber extrañado a Yanny, ¿verdad?”.

“Ejem”. Shayne se cubrió la boca con el puño y tosió levemente. Se sintió un poco incómodo por la franqueza de Heather.

Yanny le sonrió levemente. Este hombre que ha pasado por tanto, todavía tenía momentos en los que se sonrojaba.

“Te llevaré para que te laves”. Yanny le pasó un cepillo de dientes nuevo, pero no había toalla nueva en casa.

Shayne echó un vistazo al toallero y preguntó: “¿Cuál es el tuyo?”.

“El rosado”.

Shayne tomó la toalla rosa y se lavó el rostro.

Yanny estaba parada allí mientras miraba su celular. Ella se dio cuenta de que Shayne le había transferido una gran cantidad a las cuatro de la mañana. Cien mil dólares.

Yanny tomó su celular y le preguntó: “¿Por qué me transferiste dinero?”.

Y le transfirió tanto a la vez.

Shayne se limpió el rostro con la toalla. La miró con sus ojos claros, con indicios de alegría en ellos. “Estaba feliz, así que te transferí dinero”.

Yanny se quedó sin palabras. '¿Solo porque se sintió aliviado físicamente, se puso feliz?'.

Yanny lo aceptó plenamente. “Entonces recibiré esto como si fuera mi sobre rojo de año nuevo”.

El baño era un poco pequeño. Con las largas piernas de Shayne, tuvo que agacharse un poco cuando salió del baño. Cuando pasó junto a Yanny, él dijo: “Hace demasiado frío en la casa de la Abuela, así que cómprale a la Abuela dos aires acondicionados”.

Yanny sonrió tranquilamente. Sintió calidez en su corazón.

Sin embargo, Yanny se ha ofrecido a instalar aires acondicionados para Heather varias veces, pero Heather se negó porque quería ahorrar electricidad y dinero.

Heather escucharía más a Shayne. Esta vez, Yanny decidió dejar hablar a Shayne y tratar de convencerla de que instalara un aire acondicionado.

El invierno en la Ciudad del Norte era frío y húmedo. Yanny, que aún era joven, apenas podía soportar el frío del campo, y mucho menos una persona mayor como Heather.

Por la tarde, Yanny hizo una olla caliente. Ella echó muchas albóndigas congeladas y palitos de cangrejo.

Shayne nunca había comido alimentos como estos, por lo que estaba interesado en ellos. Sacó una bola de arroz morada y le preguntó a Yanny: “¿Qué es esto? Es demasiado colorido. ¿Es comestible?”.

Yanny lo miró y se rio: “Amo Shayne, realmente no eres de este mundo. Esta es una bola de arroz morada. Se ha coloreado de forma natural con arroz morado. Solo cómelo, no te envenenará”.

La boca de Shayne se crispó un poco antes de que se metiera ferozmente la bola de arroz morada en la boca.

Al morderlo, se dio cuenta de que no estaba mal.

Al verlos discutir, el estado de ánimo de Heather se volvió mucho mejor. Ella también bebió un poco de alcohol con la joven pareja para recibir el año nuevo.

Después de la comida, Heather estaba somnolienta por el alcohol, así que regresó a su habitación para tomar una siesta.

Yanny limpió la mesa. Aquí no había lavavajillas. El grifo de la cocina tampoco tenía agua caliente. Lavar los platos era una cuestión de congelar a uno hasta la muerte.

Mientras Yanny lavaba los platos, Shayne la abrazó por detrás.

Yanny preguntó: “¿Regresarás en la tarde?”.

“¿Me estás echando?”.

“Si no, ¿dónde dormirás en la noche? Con la abuela cerca, no puedes dormir conmigo”.

Además, ya hacía tanto frío en la casa durante el día, por lo que sería peor durante la noche. Él había nacido en una cuna de oro, así que, ¿cómo se acostumbraría a quedarse allí?

Shayne dijo con total naturalidad: “Bueno, si una chica como tú puede quedarse aquí, ¿por qué yo no?”.

Yanny sonrió, pero no dijo nada. Ella tomó sus manos que estaban en su cintura y las puso debajo del grifo. Shayne las retiró inconscientemente mientras gritaba: “M*erda, ¿no es agua caliente?”.

Samatha se cruzó de brazos y gruñó con arrogancia: “¿Quién te crees que eres? No me llames pequeña niña. No soy tu hija. Solo el abuelo y Shayne pueden llamarme pequeña niña en este mundo. Además, si mi hermano tiene novia o no, debes preguntarle a tu hija. Ella sabe este hecho incluso mejor que yo”.

Lina frunció el ceño y miró a Cara. “Cara, ¿qué está sucediendo?”.

“¡Mamá, regresemos y hablemos!”.

“¿El Amo Shayne ya tiene una novia allá afuera?”.

Cara trató de tirar de Lina cuando Samantha la llamó. “Cara, déjame mostrarte algo”.

“¿Q-qué es?”.

Samantha encontró la foto que Shayne le envió anoche. Lo abrió y se lo mostró a Cara, luego rápidamente guardó su celular. “¿Lo viste? Esta es la verdadera novia de mi hermano. Te sonrojas constantemente alrededor de mi hermano, pero ¿él te ha mirado antes? Deja de fingir que en realidad estás con mi hermano”.

Cada palabra que decía Samantha humillaba a Cara.

Aunque Cara solo echó un vistazo a la foto, pudo reconocer quién era la mujer de la foto íntima.

'¡Es Yanny otra vez! ¡Ella sigue seduciendo al Amo Shayne! ¡Qué p*rra! ¿Cómo se atreve a robar el prometido de otra persona? ¡Se acostó con el hombre de su hermana!'.

Cara estaba tan furiosa que casi se mordía a pedazos.

Cuando ellas se fueron de la mansión de la familia Jinn, Lina tiró de Cara y le preguntó: “Dime. ¿Quién es esta mujer con la que está saliendo Shayne? ¿Sabes quién es?”.

“¡Deja de preguntar! ¡Me ocuparé de esto yo misma!”.

Lina se burló, “Si pudieras ocuparte, entonces ¿por qué él sigue con esa mujer astuta?”.

Cara se mordió el labio. Tartamudeó por un buen tiempo. “E-es… Yanny. Ella es la que sedujo al Amo Shayne. ¡Está buscando vengarse de la familia Jacob!”.

Cuando Lina escuchó que era Yanny, se alarmó. “¡Qué mujer tan sucia! ¡Ella incluso se atrevió a robar al hombre de su hermana! No. ¡Tenemos que alejarla de Shayne! Esa zorra depende de su aspecto astuto para seducir a los hombres. Si el Amo Shayne se deja seducir por ella, ¡no podrás casarte con un miembro de la familia Jinn!”.

Cara se sintió agraviada y comenzó a llorar. Ella dijo enojada: “Mamá, ¿qué debería de hacer? ¿Cómo puedo hacer que el Amo Shayne guste de mí? ¡Realmente no quiero perder contra esa p*rra!”.

“¿Por qué lloras? ¡Límpiate esas lágrimas! ¡No podemos dejar que esa p*rra pase por encima de nuestras cabezas y se luzca!”.