Devoción apasionada: la querida esposa del Maestro Fudd romance Capítulo 246

Aunque Verian estaba muy deprimida, no era ninguna tonta. John parecía considerado con ella a primera vista, pero ella sabía que seguía sospechando de ella.

Sin embargo, tampoco deseaba volver a la casa de la familia Fudd ni quería ver a Nancy ni a los demás. Todo lo que quería hacer ahora era volver a la casa que ella y Heaton poseían para encerrarse y limpiar sus heridas en un rincón.

"Está bien".

…

Serene estaba preocupada, así que acompañó a Verian en su viaje desde el hospital hasta la mansión de Bahía de Agua superficial.

"Verian, me quedaré a dormir en tu casa contigo estos días. Me preocupa que Nancy y tu vil hermana aparezcan para molestarte".

Verian dijo, "No necesitas preocuparte por mí. La señora Leah también se está quedando conmigo".

"¿Cómo no voy a preocuparme por ti cuando te comportas así? Está decidido, me quedaré contigo por unos días hasta que tus sentimientos se estabilicen. No te molestaré después de eso".

La señora Leah dijo riéndose: "Señora, ya que la señorita Ludd quiere acompañarla, déjela quedarse ya que ambas son muy unidas. Su estado de ánimo mejorará al charlar con ella por la noche".

Verian no se negó. Sin embargo, solía hablar muy poco y no tenía ni idea de cómo hablar con Serene. Serene decía muchas cosas, pero Verian se limitaba a dar respuestas breves.

Aunque Verian ya no lloraba ni mencionaba mucho a Heaton ahora, su alegría parecía haberse agotado en su cuerpo. Comía cuando era hora de comer y dormía cuando era hora de dormir. Vivía tan normalmente que ya no podía haber nada más normal para ella.

Cuando llegó el día del funeral de Heaton, lloviznaba.

Verian estaba vestida de negro mientras estaba de pie bajo un paraguas negro y veía cómo enterraban el ataúd vacío de Heaton.

La pequeña Porotita Dulce abrazó la cintura de Verian, su pequeña cara roja e hinchada por el llanto. Preguntó mientras se sentía triste y asustada: "Monty, ¿qué le pasó a papá? ¿Papá ha muerto de verdad?".

Verian se puso en cuclillas y abrazó fuertemente a Porotita Dulce mientras decía, "No tengas miedo, papá sólo nos protege de una manera diferente. Tenemos que ser fuertes".

La pequeña Porotita Dulce sollozó y dijo: "Pero extraño a papá... Monty, quiero a mi papá...".

Unas gotas de lágrimas cayeron sin control por la cara de la pequeña traviesa. El corazón de Verian se retorcía al ver su llanto. Respiró profundo mientras contenía sus propias lágrimas y habló en un tono suave: "Eres una buena niña, porotita dulce. No llores".

"Wuuu...”.

Mientras Serene miraba desde el lado, sus lágrimas corrían sin control mientras Wilson la abrazaba.

Cuando la tumba fue sellada, Verian abrazó a Porotita Dulce mientras cerraba los ojos con fuerza.

Cuando terminó el funeral, John quiso llevar a la pequeña porotita dulce a casa y dijo: " Vamos a casa con el abuelo ahora, porotita dulce".

La pequeña porotita dulce no estaba dispuesta a dejar a Verian cuando ella dijo: "¡Quiero estar con mamá, abuelo!".

El corazón de Verian temblaba mientras pensaba para sí misma: "¿Mamá?”.

¿Porotita Dulce estaba dispuesta a llamar a su mami ahora?

Verian miró a la pequeña traviesa con sus ojos rojos. "Porotita Dulce, ¿qué... acabas de llamarme?".

"Mami". La pequeña hizo un gesto con los labios y sus ojos llorosos.

Verian la abrazó mientras las lágrimas que había estado conteniendo caían Finalmente. Sin embargo, aún tenía que convencer a Porotita Dulce de que se fuera a casa con John.

John sospechaba de ella, así que no le permitió regresar a la casa de la familia Fudd. Ella estaba viviendo en la Mansión Bahía de Agua Superficial y no podía poner energía en cuidar a Porotita Dulce. A pesar de eso, ni siquiera tenía la capacidad de enviar a la Porotita Dulce a la escuela y recogerla de todas formas. Su estado de ánimo era un desastre y le preocupaba que, si Porotita Dulce la seguía a la Mansión Bahía de agua superficial, podría resultar en que Verian no hiciera caso a Porotita Dulce. Eso sería horrible.

"Sé una buena niña ya, Porotita Dulce". Ve con tu abuelo a casa antes. Mamá ... Mamá vendrá a visitarte en unos días, ¿de acuerdo? ".

"Mami, ¿ya no quieres a Porotita Dulce?”.

Verian estiró la mano y limpió los rastros de lágrimas de su pequeña cara y dijo: "¿Cómo podría? Mami nunca dejará de querer Porotita Dulce pero la cosa es que mami acaba de perder a tu papá y por eso me siento muy desbaratada. Estoy preocupada de que no pueda cuidar bien a la pequeña porotita dulce".

Fue sólo después de eso que la pequeña Porotita Dulce cedió. Mientras lloriqueaba, ella dijo, "Entonces cuando estés de mejor ánimo, tienes que venir a visitarme, ¡sí!".

Las lágrimas habían oscurecido su visión.

Un fuerte viento de la noche de invierno sopló a través de su ventana y derribó la vela, encendiendo los extremos de las cortinas.

Cuando Verian levantó la cabeza, un humo espeso ya salía del fuerte fuego.

Verian echó agua desesperadamente encima, pero el fuego era demasiado grande. Se cubrió la nariz y salió corriendo de la casa.

La señora Leah se despertó asustada y dijo: "¿Qué ha pasado, señora? Oh Señor, ¿por qué hay un incendio?".

La señora Leah llevó a Verian fuera de la mansión enseguida. Afortunadamente, los bomberos estaban cerca y el fuego no se extendió demasiado. Fue una noche muy dura.

Verian estaba sentada en el sofá de la sala, completamente carente de vida.

La señora Leah estaba muy aterrorizada y dijo: "Señora, ¿por qué demonios encendió velas en su habitación en medio de la noche?".

Verian no habló. Se comportaba como si fuera muda.

La Señora Leah llamó a Serene. Serene cogió un taxi en mitad de la noche para ir a la mansión. Cuando vio a Verian, que parecía perdida en sus propios pensamientos sentada en el sofá, se asustó mucho y dijo: "¿Estás bien, Verian?".

Verian se mordió el labio. Su cara se veía sucia mientras levantaba lentamente la cabeza para mirar a Serene. Le dijo: " Serene, ¿por qué no apareció Heaton cuando encendí las velas la séptima noche?".

"Verian...".

Verian comenzó a llorar impotente mientras decía: "Encendí muchas velas, pero Heaton no regresó... ¿Por qué... por qué es así...”?

Serene se acercó para ayudar a limpiarse la cara. Ella la consoló diciendo: "Tal vez, tal vez regresó, pero no lo viste... Mira, se produjo un gran incendio y estás realmente ilesa. Tiene que ser Heaton quien te estaba protegiendo. El fuego fue su manera de decirte que ha vuelto".

Cuando la Señora Leah escuchó eso, también se sentó y la consoló. "Sí, señora. La Srta. Ludd tiene razón. Heaton debió sentir que usted lo esperaba y por eso regresó".

Verian mantuvo la cabeza baja. Después de un momento habló con voz suave: "La verdad es que sé que cuando una persona muere, no queda nada más... Sin embargo, sólo quería poner mi fe en la tradición por una vez. Sólo quiero volver a ver a Heaton".