Diario de una Esposa Traicionada romance Capítulo 954

¿Por qué? ¿No estaba siguiendo las órdenes del señor Córdoba? ¿Por qué aún así me castigan?

El capitán, con las manos cruzadas detrás de la cabeza y un tono despreocupado, respondió: "Oh, porque lastimé el cabello de la señora".

El equipo quedó perplejo.

¿Acaso eso tiene algún sentido?

...

Después de no comer bien en la casa de los Elizondo, al regresar al lugar donde vive Leticia, Ander se dirigió directamente a la cocina para prepararle algo de comer.

Leticia lo siguió y le ató el delantal.

"Con cocinar unos fideos será suficiente".

Ander asintió, "Espera afuera".

Leticia aprovechó para revisar sus correos electrónicos, organizando el trabajo reciente.

Pero se encontró sin internet.

El internet estaba vinculado a su número de teléfono, si el teléfono no estaba suspendido, el internet no debería fallar, así que llamó a la compañía de telecomunicaciones para preguntar.

Le informaron que había sido desconectado intencionalmente.

Encontró el módem y vio que el cable de red estaba desconectado.

"..."

Después de reconectarlo y esperar un poco, el módem se activó y la computadora se conectó automáticamente a internet.

Abrió su correo electrónico.

Y encontró un mensaje de una cuenta no registrada, al abrirlo, se quedó congelada.

...

Ander terminó de cocinar los fideos y la llamó varias veces sin obtener respuesta.

Fue a la habitación y la encontró sentada frente al escritorio.

"Iba a..."

Al ver la pantalla de la computadora, se detuvo abruptamente.

Clack—

Cerró la pantalla de la computadora y se inclinó para mirarla a los ojos.

Notó que sus ojos estaban llenos de lágrimas, pero se negaba a dejarlas caer.

Sus ojos se enrojecieron, pero amplificaron las emociones complejas que albergaba.

Lo que más había, era desolación.

Ander la abrazó rápidamente, "No temas".

Leticia lo abrazó de vuelta y las lágrimas comenzaron a caer.

Fue en ese momento cuando Ernesto Elizondo entró.

"Señor..."