El Amor Eterno romance Capítulo 1136

El clima en Finlandia era similar al de Ciudad Wu entre junio y julio. Sin embargo, Finlandia era un poco más fría. Por lo general, tenía un clima soleado y despejado.

Yara estuvo muy ocupada durante ese período. Ella siempre trabajó horas extras porque el equipo aceleró el progreso del desarrollo de software. Siempre era medianoche cuando ella usualmente salía del trabajo y llegaba a casa.

Cuando Yara se escabulló del trabajo para asistir a la fiesta de barbacoa, su trabajo se acumuló. Eran las dos de la mañana cuando finalmente terminó de trabajar.

Pasar toda la noche trabajando no era agotador para ella, ya que todavía era joven. Ella no se preocupaba.

Ella bostezó y miró a su colega, quien la acompañaba mientras trabajaban horas extras.

Todos eran compañeros desarrolladores de software que eran mayores que ella. Sus cuerpos no podrían soportarlo si tuvieran que trabajar constantemente horas extras. Cuando terminaron el trabajo, todos parecían agotados.

Cuando Yara vio lo cansados ​​que estaban, ella se sintió mal por ellos.

Ella golpeaba la mesa de cristal con los dedos. Inmediatamente, todos se alertaron y trataron de concentrarse.

Yara luego dijo con una sonrisa amable en su rostro: "Todos, paremos por el día de hoy. Hablaré con Zachary una vez que terminemos el proyecto. Tal vez haga una solicitud para unas largas vacaciones".

Todos asintieron y dijeron: "Gracias, señorita Thompson".

Los colegas de Yara conocían bien las capacidades de ella. Inicialmente, ellos no podían comprender por qué habían asignado como líder a alguien joven como ella.

Sin embargo, una vez que ella mostró su talento e interpretaciones únicas, todos quedaron convencidos. Ellos admiraron su inteligencia.

Aunque ella era joven y tenía mucha menos experiencia en comparación con ellos, ella era inteligente y rápida para ponerse al día. No solo eso, sino que también era rápida en hacer inferencias y comprender ecuaciones rápidamente. Yara era capaz de hacerles alcanzar niveles más altos en su desarrollo.

Como todos sabían, la chica del suéter rosa que estaba sentada frente a ellos era un indiscutible genio joven.

Solo había un pequeño grupo de genios en el mundo. De alguna manera, uno de ellos apareció y se unió a su equipo. Con el pasar del tiempo, se acostumbraron a trabajar con ella.

Estaban acostumbrados a estar en presencia de un genio.

"No se preocupen, terminaré el resto. Ustedes pueden irse".

Todos se levantaron uno a uno y salieron de la oficina. Tomaron el ascensor y bajaron. Mientras seguían sus caminos, entablaron una acalorada discusión sobre su colega, Yara.

Cuando llegaron a la puerta, nunca notaron a un hombre que había permanecido allí en silencio. Ellos continuaron con sus elogios hacia ella con gran respeto. “La señorita Thompson solo lleva aquí una semana y ya está acostumbrada a todo el flujo de trabajo. Además, parece que ella es capaz de liderarnos en el desarrollo de este nuevo software. ¡Ella es verdaderamente un genio!".

"Escuché que solo tiene diecinueve años. Fue investigadora científica hace unos años y tiene muchas patentes. ¡Ella es un genio! Pero escuché que se ha ralentizado mucho en los últimos años y ahora es más perezosa".

Alguien preguntó: "¿De dónde sacaste esa información?".

Como comentaron en inglés, el hombre que se escondía en silencio los entendió con claridad.

Él escuchó a sus colegas que decían: "Ella no ha publicado ninguna investigación recientemente en los últimos dos años. Escuché que es porque está casada, eso está afectando su trabajo".

“Es normal que ocurra eso cuando una chica se enamora. Quiero decir, ella es solo humana. ¡Vamos! Deberíamos llegar a casa y descansar".

El hombre frunció el ceño y se preguntó en voz baja: "¿Realmente estoy afectando su trabajo?".

Lance se enteró de la carrera de Yara recientemente. Naturalmente, ella nunca se lo contó. Él solo se enteró por su investigador privado.

Por alguna razón desconocida, ella siempre evitaba hablar con él sobre el trabajo. Lance no estaba seguro de por qué, pero ella estaba empezando a compartir pequeños detalles de su vida poco a poco con él.

Ella nunca ocultó el motivo de su viaje a Finlandia. Ella le dijo a Lance que trabajaba para Zachary y él se alegró de que ella lo compartiera con él.

Él tuvo que esperarla durante seis horas y no tuvo ni una pizca de impaciencia.

Él siempre fue muy paciente a la hora de esperar a Yara.

Ya eran las dos de la mañana. La mayoría de los trabajadores ya habían salido del trabajo. Mientras se iban, él los escuchó hablar de su joven esposa.

Por su tono y lo que decían, él pudo notar que la respetaban y la admiraban.

Bueno, eso era normal.

Él también estaba orgulloso de ella.

Él estaba orgulloso de que la joven fuera tan sobresaliente. Él admiraba lo humilde que era ella a pesar de todos sus logros.

Él respetaba su generosidad trascendente. Ella donó todo lo que consiguió en los últimos años a los más necesitados.

Ella era una persona tan grandiosa que él sentía que no la merecía.

Lance lo pensó detenidamente.

Era injusto que ella estuviera casada con alguien catorce años mayor que ella. Él sentía que no la merecía, pero él también se sentía afortunado.

Él tuvo la suerte de estar casado con ella.