Antes de que Megan pudiera responder, Karina dijo: "¿Qué tía? No estamos casados todavía".
Curtís se acercó para pararse a su lado y sonrió, "¿Crees que puedes deshacerte de mí? Mujer, no puedes escapar de mí".
Su novia se sonrojó y le hizo una mueca, "Necesito robarles a Debbie por un minuto, chicos, adelante, continúen con su plática", luego tomó la mano de Debbie y se la llevó a la puerta. Después de que salieron de la sala, Karina miró a Debbie y dijo preocupada: "Sobre lo de que Carlos salvó a Megan, no lo malinterpretes".
"Lo sé", respondió Debbie, sin embargo, encontró un poco raro el comportamiento de Karina.
Cuando llegaron a la escalera de emergencia, ella se detuvo y le recordó: "Debbie, no tienes que enfadarte con tu marido por culpa de Megan, eso te ahorrará problemas innecesarios".
"¿Qué estás tratando de decirme? No entiendo", replicó Debbie.
Karina se rio y dijo: "Cierto, estaba tan ansiosa que olvidé que sólo habías visto a Megan unas cuantas veces", luego bajó la voz y prosiguió: "No sé qué está haciendo esa chica... ¿Pero sabes qué? La novia de Wesley, bueno, novia por así decirlo, se comprometió con otra persona, principalmente por culpa de ella".
Debbie se sorprendió por lo que acababa de saber, ella sabía que Karina estaba hablando de
Megan.
"Después, Curtís y yo discutimos un par de veces también, todo por culpa de esta chica.
No quiero hablar de ella a sus espaldas, pero es demasiado manipuladora, nunca sabes lo que está pasando por su mente. De todos modos, ten cuidado, espero que no tengas problemas con tu marido por culpa de ella, de lo contrario, sólo le darás gusto, ¿de acuerdo?", explicó Karina.
Finalmente, Debbie entendió lo que quería decir, "Si ella es tan despreciable, ¿por qué ninguno de los cuatro puede notarlo?". A ella le pareció extraño que los cuatro hombres pudieran adorar a Megan, incluso con pleno conocimiento de su manipulación, ¿acaso estaban ciegos?
"Son hombres, sólo las mujeres pueden ver a través de los pensamientos oscuros y profundamente enterrados de otras mujeres. Para los ojos de ellos, Megan es una chica inocente, adorable, un ángel, nunca pensarían mal de ella, tampoco creen que pueda crear problemas entre nosotros", dijo Karina, encogiéndose de hombros con resignación.
Si lo que dijo era verdad, entonces Megan era realmente una horrible persona. "Me pregunto qué hará ella", dijo Debbie con sinceridad.
"¿Quién sabe? A veces actúa como si le gustara Wesley, pero también mantiene una distancia técnica con él, en ocasiones parece que le gusta Carlos, pero nunca toma mucha iniciativa. Pero Damon y Curtís tienen casi la edad suficiente para ser su padre, es poco probable que se concentre en ellos", respondió Karina.
Debbie se sentía cansada, estaba agotada de tratar de averiguar lo que escondía la mente de
Megan.
"Ahora no es un momento conveniente para hablar, te invitaré a tomar un té en otro momento, piensa en lo que te acabo de decir. No digas una sola palabra a esos cuatro, de otra forma, pensarán que estamos tramando algo contra su inocente, adorable y pequeña Megan", advirtió Karina. Su último comentario estuvo lleno de ironía, "Ah... me siento muy bien de poder sacar finalmente estas palabras de mi pecho, me moría por hablar con alguien, pero no había nadie con quien pudiera hacerlo y ahora puedo platicarlo contigo. En serio, nadie conoce mejor a una mujer que otra mujer, entre tú, Megan y yo, eres el alma más inocente y adorable. Me encantaría tenerte como amiga, sólo para disfrutar de tu compañía educada con una taza de té o incluso de compras".
Debbie se sorprendió por los comentarios de Karina, '¿Realmente soy inocente? ¿Y adorable?', dijo en su interior. "Karina, no puedes estar más equivocada, cualquiera puede ser inocente, menos yo", exclamó Debbie.
"Está bien, volvamos. Y una cosa más, eres muy especial para Carlos, aprecia lo que tienes", dijo Karina, visiblemente traviesa, para sorpresa de Debbie. Cuando la conoció, Karina era una diva de la alta sociedad muy elegante. Debbie la recordaba cómo la chica que había deslumbrado en la fiesta de cumpleaños de Megan, una diosa impresionante en la pista de baile, sencillamente era toda una personalidad, pero hoy, ella se había portado tan accesible y perspicaz. 'Esta chica es una mezcla completa de diferentes gracias', pensó Debbie.
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