O romance El Secreto de Mi Prometido foi publicado em Capítulo 278 com detalhes novos e inesperados. Você pode dizer que o autor Internet investiu muito em El Secreto de Mi Prometido com sinceridade. Depois de ler Capítulo 278 , senti uma tristeza gentil, mas profunda. Agora, vamos ler Capítulo 278 e os próximos capítulos da série El Secreto de Mi Prometido no Good Novel Online.
Apenas se dijeron esas palabras, todos los presentes quedaron atónitos.
Víctor se puso serio.—Aquí solo estamos los nuestros, Andrés, ¿qué estás insinuando? ¿Acaso crees que alguien de esta familia filtró información a extraños para poder hacerte daño?
Doña Ximena también intervino: —Eso mismo, Andrés. Antes de irte nos pediste expresamente que no llamáramos a la policía. Por muy vieja y olvidadiza que esté, no he llegado al punto de obviar algo tan importante. Nosotros no fuimos quienes llamamos a la policía. Esto comprometía tu vida, jamás habríamos revelado nada a nadie.
Miguel añadió: —Te lo aseguro, ni tu tía Carla ni yo filtramos nada. Luisita todavía está en manos de ellos. Si se hubiera filtrado información, tanto tú como ella estarían muertos. Carla y yo jamás habríamos corrido ese riesgo. Incluso cuando, poco después de que te fuiste, Violeta desapareció, seguimos recordando bien tu advertencia de no contactar a la policía.
Patricia también manifestó su desacuerdo: —Aquí tiene que haber un malentendido.
Valentina dijo: —Claro, hermano, seguro es un malentendido. ¿Y si fue algún amigo o colega de Luisa quien, sin querer, dejó escapar algo y alguien con malas intenciones lo escuchó y llamó a la policía para hacerte daño?
Andrés aún no había dicho nada, cuando de repente Luisa sonrió.
Apenas curvó los labios, y sus ojos brillaban como si contuvieran hielo.—Valentina, el que llamó a la policía fue Carlos. ¿Fuiste tú quien le contó lo que estaba pasando?
Valentina se puso blanca como una hoja.—¿Luisa? ¿De qué estás hablando? Yo jamás...
¡Paf!
Un sonido nítido y seco.
Antes de que Valentina terminara de hablar, Luisa ya le había soltado tremenda bofetada.
Fue rápida y brutal. Miguel y los miembros de la familia Martínez se quedaron paralizados, visiblemente sorprendidos.
Valentina, con la mano en la mejilla y los ojos llenos de lágrimas, dijo con voz dolida: —Luisa, sé que nunca te he caído bien, pero no puedes acusarme sin pruebas, mucho menos en un momento como este...
Comentários
Os comentários dos leitores sobre o romance: El Secreto de Mi Prometido