Ella Aceptó el Divorcio, Él entró en Pánico romance Capítulo 333

La señora Green estaba viendo puntos negros frente a sus ojos, todos sus recuerdos con Ava pasaban como un relámpago por su mente.

Apenas el otro día, los Fuller estaban hablando sobre cuánto apreciaban a esa donante, ¡incluso dijeron que el nombre de la chica también era "Sophia"! Se pintaron a sí mismos como las personas agradecidas e inocentes que seguían ayudando a esa chica, a pesar de que ella había chantajeado su camino hacia un matrimonio con Sebastián.

Eso no era lo que decían sobre Scarlett Fuller, y ciertamente, ella no sabía que Sebastián estuvo casado con la otra chica Fuller todo ese tiempo.

¿Él no estuvo en una relación con Ava todos esos años?

Después de todo, así era como Ava se había estado presentando frente a ella.

—Pero... pero tú... —La Dama Green agarró el brazo de Ava, rezando desesperadamente para que le pudiera proporcionar una buena explicación a cualquiera de esas cosas, pero Ava parecía asustada y confundida, mirándola con una expresión inofensiva e inocente.

Sophia Green no pudo formular una pregunta. Miraba fijamente la expresión inocente de Ava, dándose cuenta de repente, de que realmente no podía señalar ningún momento en el que Ava le hubiera dicho que estaba con Sebastián, porque nunca había dicho nada parecido, jamás.

Entonces, ¿por qué tenía esa impresión?

¿Porque cada vez que elogiaba a Sebastián por tener una buena esposa, según lo que decía su abuela, Ava solo sonreía y bajaba la cabeza tímidamente? ¿Porque cada vez que bromeaba con Ava sobre lo afortunada que era de tener un amor tan genuino, con un hombre que la acompañaba a todas partes y la cuidaba atentamente, ella asentía y miraba a Sebastián con cara de felicidad? ¿Porque cada vez que preguntaba cuándo sería la boda, Ava decía que sucedería pronto?

Sí, todo eso. Pero, ¿podía acusar a Ava de mentir solo por esas cosas?

No, nada de esto era una mentira, solo engañoso, como mucho.

Sophia miró a Ava con total incredulidad, de repente, sentía que nunca había conocido realmente a esa persona a quien consideraba como su propia nieta.

Pero, ¿quién era Ava Fuller?

Era la hija de Anna Fuller, una mujer que había sido la mejor amiga de su propia hija veinte años atrás, la hija que abandonó su hogar de la manera más horrible y no le habló durante veinte años. La visitaba solo una semana cada año, llamándola abuela como si la quisiera profundamente.

Y... era una mentirosa.