Perspectiva de Sebastián
Jim me hace un gesto de "ok" al mismo tiempo. Rastrearon la ubicación de Liam, y comprobamos que él está diciendo la verdad. Jim me muestra un papel que dice: [Gana más tiempo para el francotirador].
"Iré lo antes posible," le digo Liam a través del teléfono, buscando cómo alargar la conversación sin que se note. "¿Quieres que lleve a Justin conmigo? Para ti, él es el asesino, ¿verdad?"
Liam hace una pausa. Mi propuesta claramente lo toma por sorpresa.
"Tienes razón... sí, trae a ese bastardo," gruñe. "¡Y a su esposa también!"
"De acuerdo, los recogeré de camino," le aseguro mientras salgo y sigo hablándole. "Aunque no sabía que su esposa estaba involucrada."
"¡Esa maldita no dudó en ensuciar a mi Sparrow!"
"Pero..."
"¡Deja de dar vueltas y cierra la puta boca! ¡O tal vez mate a una de las dos por diversión!"
Cuelga. Miro a Jim, quien asiente con la cabeza: "Lo hiciste bien. Iré contigo. ¿Puedes contarme algo sobre Justin?"
La verdad, no hay mucho que contar sobre él. Justin ha estado con su esposa actual, Annie Murphy, desde el bachillerato. Cuando lo contraté, su historial estaba limpio. Le propuso matrimonio a Annie, ella aceptó, y los padres de ambos bendijeron su unión. Fin de la historia.
Sparrow no estuvo de acuerdo. Alegó que Justin era su novio y que la abandonó al volverse famoso.
Fue un evidente malentendido, o una mentira. Él no alcanzó la fama hasta que lo firmé, y yo conocía su situación. Por eso los Ryan no tuvieron margen en el juicio. Incluso si fuera cierto, Justin tenía muy poca responsabilidad en el suicidio de Sparrow.
La demanda de los Ryan argumentaba que Justin prometió casarse con Sparrow, y al romper esa promesa cuando eligió a Annie, Sparrow lo amenazó con suicidarse para detenerlo.
¿Les provoqué algún problema en su matrimonio con mi petición?
"Es comprensible," le doy una palmada en el hombro y avanzo. "Lamento haber causado esto. Fue un capricho egoísta..."
"No, tú no," Justin suspira hondo y se sube al asiento trasero. "Las cosas ya no eran color de rosa antes de hoy..."
"Lamento tener que pedirte esto hoy, sobre todo por cómo comenzó tu matrimonio...," no sé qué más decir. "Haré algo para compensarte..."
"No, tampoco es eso." Alza la mirada, y en sus ojos veo una profunda desilusión. "Nuestro matrimonio empezó bien... al menos para Annie. Si yo me sentía afligido por lo ocurrido, ella vivía en plena felicidad."
¿Qué? No era lo que esperaba de su "amor de toda la vida".

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Los comentarios de los lectores sobre la novela: Ella Aceptó el Divorcio, Él entró en Pánico