Esposa Pecadora romance Capítulo 1064

Ella quería hacerle una prueba de laboratorio.

Apenas Jeremy salió del café, recibió una llamada de Lana preguntándole dónde estaba.

Él le dijo tranquilamente que estaba comprando un regalo para ella y ella se dejó engañar.

20 minutos más tarde, Jeremy volvió a la casa de Lana con una caja de bombones que había comprado en la calle.

Nada más entrar en la habitación, escuchó la voz interrogativa y descontenta de Yorick: "Te dije que volvieras al País F. ¿Por qué sigues aquí?".

"Yorick Johnson, soy tu hermana. ¿Cómo puedes tratarme así por culpa de Eveline?". Lana hizo una mueca de disgusto mientras se sentaba en el sofá. Encendió un cigarrillo y dio una gran inhalación como una jefa mafiosa. "Yorick Johnson, tengo curiosidad. ¿Quién es el hombre que te impide hacerle daño a Eveline?".

A Yorick no le importó lo grosera que estaba siendo Lana en ese momento, incluso cuando usó su nombre completo. Solo le recordó solemnemente: "Es mejor que no lo sepas. Si lo supieras, no te beneficiarías mucho de ello".

"¿Beneficiarme? ¿De qué estás hablando? Lo único importante para la Banda Estigia Johnson es ganar dinero".

"¿Entonces sabes por qué la Banda Estigia Johnson ha podido ganar tanto dinero de forma segura en los últimos años? Es gracias a esa persona".

Cuando Lana escuchó eso, hizo una pausa mientras inhalaba una bocanada, pero una sonrisa desdeñosa pronto apareció en su rostro. "¿Qué clase de broma tonta estás haciendo? ¿Qué tiene que ver el dinero de la Banda Estigia Johnson con esa persona? Si tienes los huevos para decir este tipo de cosas, ¡entonces dámelos hoy mismo, Yorick!".

Yorick estaba furioso con Lana. Le dijo: "¡Bien, te lo diré ahora!".

Cuando Jeremy escuchó lo que estaban hablando, se acercó dos pasos para escuchar con atención lo que iban a decir, pero justo entonces apareció Fabián.

"Lana, deberías haber vuelto al País F cuando Yorick te lo dijo. Le hiciste perder cien millones de dólares. ¿Por qué sigues aquí?".

"¿Por qué dudaría de ti?". Lana se acercó más a él. "Jeremy, eres mi hombre. ¿Qué más no te he dado? Confío mucho en ti. No debes decepcionarme ni dejarme".

Jeremy señaló el cigarrillo. "¿Crees que puedo alejarme de ti?".

Lana dijo con una expresión de impotencia: "Jeremy, no me culpes por hacer esto. Solo quiero tenerte a mi lado. Te quiero de verdad y no quiero perderte. No te preocupes, mientras seas mi hombre, nunca dejaré que te pase nada".

Mientras hablaba, estiró la mano lentamente y le entregó la memoria USB a Jeremy.

"Jeremy, te estoy entregando esta memoria USB ahora mismo. A partir de ahora, estamos en el mismo equipo".

Jeremy agarró la memoria USB suavemente y se rio. "Te equivocas. Tú y yo no estamos en el mismo equipo".