Esposa Pecadora romance Capítulo 1090

Cuando Ryan recordó lo que Jeremy le dijo antes de irse, le prometió en voz baja: "Eveline, haré todo lo que pueda para hacerte feliz".

Madeline sonrió tímidamente y se tragó todas sus emociones.

Karen se acercó a ella felizmente cuando vio que Madeline volvía a la Mansión Whitman. "¡Eveline, han detenido a Lana!".

"¡Pertenecía a una mafia, así que no me extraña que sea tan atroz!".

"¡Jum! El mal nunca puede prevalecer sobre el bien, después de todo. ¡Ella sufrirá las consecuencias de lo que ha hecho!".

Era evidente que Karen estaba de buen humor.

Sin embargo, Madeline recordó lo que acababa de ver en el vídeo. Jeremy le había puesto las esposas a Lana en persona y, en ese momento, aquella diabólica mujer se derrumbó ante la idea de estar encerrada entre rejas.

Madeline sabía que debería sentirse feliz, pero en ese segundo, en cambio, sintió pesadez en su corazón.

En la madrugada del final del verano, compró unas flores y se acercó sola a las tumbas de Eloise y Sean.

Tras inclinarse ante ellos, murmuró: "Mamá, papá, la persona que los mató ya ha sido detenida. Será castigada muy pronto. Espero que ahora puedan descansar en paz".

Sintió en su piel la suave brisa otoñal que le heló el corazón. Sus ojos empezaron a ponerse rojos por el viento.

"Mamá, papá, ¿p-pueden perdonar a Jeremy?".

Cuando hizo esa pregunta, no pudo controlar más sus lágrimas.

Se sentía culpable.

No podía curar la herida de su corazón independientemente de si perdonaba o no.

Madeline se quedó en el cementerio durante mucho tiempo.

Nadie fue capaz de responder a su pregunta.

Recordó la sangre en el pañuelo que tomó para la prueba y el persistente olor de Jeremy en él.

¿Qué estaba pasando?

Madeline sintió que la cabeza le palpitaba de dolor.

Cuando Ryan entró en la cocina, vio a Madeline en la cocina sosteniendo el cuchillo mientras estaba perdida en sus pensamientos.

Ryan se preocupó y le vendó inmediatamente la herida.

"Eveline, ¿qué pasó? ¿Por qué estás ahí de pie aunque estés sangrando?".

Al oír la voz de Ryan, el cerebro de Madeline registró lo que estaba pasando.

De repente recordó algo y se dirigió a la sala de estar. Entonces, tomó su teléfono y llamó al técnico de laboratorio que la había llamado anteriormente.