Esposa Pecadora romance Capítulo 1142

Naya se sentó lentamente y permitió que el vendedor le pusiera los zapatos.

Como no quería perder el tiempo con Naya, Ava se dio la vuelta para irse solo para que Naya se burlara de nuevo.

"¿Se va, señorita Long? ¿Las cosas de aquí son demasiado caras para ti? No pasa nada. Daniel y yo somos grandes amigos de la infancia. Puedo prestarte dinero si no puedes pagarlas ahora. No sigas usando imitaciones, ¿de acuerdo? Imagina lo vergonzoso que sería si alguien se enterara".

La expresión de Naya era de arrogante superioridad mientras mostraba la pulsera en su muñeca.

Al ver que Ava la miraba fijamente, Naya levantó la muñeca. "¿No es hermosa esta pulsera? Por supuesto que lo es. Es una pulsera de seis cifras, después de todo. Es una pulsera de edición limitada de Miss L.ady de hace dos años. Ni siquiera el dinero puede comprarla ahora".

Ava sonrió y alabó al ver a Naya presumir: "No me extraña que sea tan bonita. Es la edición limitada de Miss L.ady".

Con su ego alimentado, Naya se levantó y caminó hacia Ava con los zapatos puestos.

"Eres Ava Long, ¿verdad?".

Ava asintió. "¿En qué puedo ayudarla, señorita Méndez?".

Mirando a los otros clientes y al personal de la tienda, Naya levantó la voz. "Sé que solo estás con Daniel porque su familia es rica, Ava. Hay demasiadas personas interesadas como tú en este mundo, pero primero debes mirarte a ti misma".

Levantó su mirada arrogante y le echó un vistazo a Ava. "Mírate. Ni siquiera llevas un solo artículo de marca. ¿Cómo puedes ser digna de Daniel? No me pareció bien señalar tu mentira cuando estábamos en la Mansión Graham, pero no pretendas ser un pez gordo cuando ni siquiera tienes dinero para respaldarte. No compres imitaciones para fingir que perteneces a este círculo si no puedes comprar la marca original".

Entonces, Naya puso los ojos en blanco con arrogancia. "¿No sabes lo embarazoso que sería que alguien se diera cuenta?".

Madeline se enfureció mientras se acercaba a Naya y preguntaba con calma: "¿Y usted, señorita Méndez? Usted afirma que es vergonzoso, así que ¿también sabe lo que se siente cuando alguien se da cuenta de que lleva imitaciones?".

"¿Qué?". Naya se burló con desdén. "¿Me va a demandar por difamación? Entonces, ¿qué hay de ti? ¿Lo que acabas de decir no es también difamación?".

"No lo es". Madeline sonrió ligeramente y señaló la pulsera de Naya. "Esa pulsera que llevas es falsa".

Naya se quedó boquiabierta. Sus ojos brillaron con intensidad mientras estallaba en carcajadas y señalaba a Madeline con arrogancia.

"¿Crees que es falsa solo porque tú lo has dicho? ¿Quién te crees que eres? ¿Quién eres tú para valorarlo? ¡Solo estás maldiciendo a la higuera porque no puedes comer de su fruto! Esta es una pulsera exclusiva de Miss L.ady de hace dos años. ¡Probablemente nunca la habías visto antes!".

"Si ella no lo ha visto, entonces no creo que haya nadie más en este mundo que lo haya hecho". Ava rodeó con su brazo el hombro de Madeline con orgullo mientras la presentaba.

"Ya que no lo sabes, Naya Méndez, entonces déjame decírtelo. Esta hermosa y amable mujer de aquí es Vera Quinn, la mejor diseñadora de Miss L.ady de aquel entonces. Al menos debes haber oído su nombre antes, ¿verdad?".