Esposa Pecadora romance Capítulo 1281

Jeremy sintió que su corazón se detenía.

Gracias al impulso, Madeline cayó hacia delante y en los brazos de Jeremy.

Ella no tenía ni idea de qué entidad ardiente atravesaba su cuerpo, pero la calidez y la satisfacción se adentraron en ella en el momento en que cayó en los brazos de Jeremy.

"Jeremy".

Levantó la mano para abrazar al perplejo hombre.

"Por fin me has encontrado, Jeremy". Madeline jadeó con la respiración entrecortada.

Con el rostro pálido, Jeremy atrajo a Madeline hacia sus brazos. No tenía ni idea de dónde estaba la herida en el cuerpo de ella, pero sentía la pegajosidad de la sangre fresca emanando de ella.

"No te duermas, Linnie. ¡Te llevaré al hospital!". Cargando a Madeline y corriendo frenéticamente hacia delante, Jeremy parecía haber olvidado por completo que él también era un paciente atormentado por el veneno de su interior.

Apoyada con fuerza en el pecho de Jeremy, Madeline se sintió feliz.

"Sabía que me encontrarías. Lo sabía, por eso te estuve esperando todo este tiempo. Te he echado tanto de menos, Jeremy...".

Ella habló de su anhelo débilmente.

La visión de Jeremy comenzó a difuminarse lentamente bajo la fría noche antes de que él se diera cuenta.

"Yo también te he echado de menos, Linnie. Cada segundo de cada día", respondió.

Los labios de Madeline se curvaron felizmente para formar una sonrisa mientras apoyaba la cabeza en el pecho de Jeremy y cerraba los ojos agotada.

"Mis padres siguen vivos, Jeremy. No han muerto".

Los pasos de Jeremy se detuvieron.

Recordó todo cuando se golpeó la cabeza en el avión.

Eloise y Sean seguían vivos. Después de todo, ¡él fue quien los salvó!

Sin embargo, Jeremy no tenía tiempo para explicar todo eso en ese momento, ya que lo único que quería era que Madeline estuviera a salvo.

Jeremy cayó sobre una rodilla. Bajo el cielo azul oscuro de medianoche, sintió que la oscuridad envolvía su corazón.

"Te lo dije. Si yo no puedo tenerla, tú tampoco".

La voz de Ryan se escuchó de repente desde el frente.

Los ojos de Jeremy se levantaron para ver a Ryan y su expresión victoriosa. El hombre llevaba una pistola en la mano. Se podía concluir fácilmente que fue él quien le había disparado a Madeline.

"¡Ryan Jones!". Jeremy apretó los dientes mientras miraba con repugnancia al hombre sonriente. Las lágrimas comenzaron a llenar sus profundos ojos.

Ryan miró con arrogancia a Madeline, quien había caído inconsciente en los brazos de Jeremy.

"Tiene el raro tipo de sangre Rh negativo. Morirá por pérdida de sangre en poco tiempo si la dejas desangrarse aquí".

Se agachó mientras hablaba, y las comisuras de sus labios se curvaron en una sonrisa confiada.

"Tu única opción es entregármela".