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Fabián se detuvo, pero no se dio la vuelta.
Cuando escuchó los pasos de Jeremy acercarse, se quedó quieto en su lugar.
“Fabián, ¿realmente no encontraste el reactivo antitoxina en Linnie?”.
“¿Qué está insinuando, señor Whitman? ¿Me está acusando de haber elegido intencionalmente no salvar a su esposa?”, preguntó Fabián con una leve sonrisa.
“Solo quiero saber si buscaste cuidadosamente”.
Jeremy no tenía intención de discutir con Fabián. Todo lo que quería en ese momento era encontrar el reactivo antitoxina que pudiera ayudar a aliviar la condición de Madeline.
Le había costado mucho esfuerzo “robarle” el vial con el reactivo antitoxina a Carter. En esta situación actual, ese vial era lo único que podía ayudar a Madeline.
“Mi amigo y yo hemos rebuscado en todos sus bolsillos y en los lugares donde podía esconder cosas, pero no hemos encontrado el reactivo antitoxina que usted mencionó”, respondió Fabián con considerable paciencia.
“¿Cómo es posible?”. Jeremy no podía hacerse a la idea. “Linnie me prometió que la llevaría donde quiera que fuera”.
“¿Qué clase de veneno es? ¿El mismo que tienes en tu cuerpo?”. Fabián presionó con sus preguntas; su expresión era ligeramente más solemne.
Jeremy se encontró con la mirada inquisitiva de Fabián y separó sus delgados labios: “Es un tipo de veneno que podría destruir completamente el corazón y el cuerpo al final. No mata, solo atormenta sin fin”.
“...”.
Tanto Fabián como Evan, que estaban uno al lado del otro, se sorprendieron al escuchar la explicación de Jeremy.
“¿Cómo puede haber cosas así? ¿Por qué alguien desarrollaría un veneno tan aterrador?”. Evan no podía entenderlo.
Ya sea desde el punto de vista de un médico o de una persona común, Evan no podía aceptar el hecho de que hubiera algo tan aterrador y dañino en este mundo.
“Esto es todo lo que puedo hacer. De aquí en adelante, tomaremos caminos separados”, dijo Fabián con frialdad antes de seguir caminando.
“Fabián, ¿crees que puedes irte así como así? Puedes elegir no preocuparte por Linnie, pero ¿qué pasa con mi hija? ¿A dónde te la has llevado?”.
La expresión de Jeremy se volvió mucho más severa.
Jeremy se acercó a Fabián. Con un cuerpo tan alto y ancho, Jeremy parecía una pared mientras bloqueaba el camino de Fabián.
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