Esposa Pecadora romance Capítulo 1798

“...”.

Jeremy tartamudeó; sus palabras se atascaron en su garganta.

Jeremy tembló ante los ojos de Madeline que lo miraban fijamente.

“Linnie, yo...”.

“¿Linnie?”. Madeline repitió la palabra y de repente dejó escapar una risa leve pero fría. “¿Qué te pasa? El hombre al que más quiero, pero que más me odia me llama ahora Linnie”.

Madeline soltó una risita y se levantó lentamente.

Jeremy quiso ir a apoyarla, pero fue rechazado con desdén por Madeline.

Él se dio cuenta de que Madeline no estaba en su sano juicio, ya que los ojos enrojecidos de ella brillaban, contrastando con su rostro inusualmente pálido.

Madeline usó una mano para sentarse en la cama y la otra se la llevó de repente al pecho.

Ella cerró los ojos y respiró con fuerza.

El ritmo normal de su respiración y los latidos de su corazón se interrumpieron.

“Linnie, ¿podrías darme un poco de tiempo y escucharme?”, le suplicó Jeremy con un tono dócil.

La actitud fría y serena de Madeline ante él le hizo recordar la mirada vengativa que ella tuvo en el pasado.

Estaba aterrado por la sensación que había experimentado en aquel entonces. La sensación de ser mirado fijamente por los fríos ojos de la mujer. Incluso en ese momento, podía recordarlo vívidamente.

Evan, al ver la escena desde un lado, se dio la vuelta con tacto para marcharse.

Después de dejar la escena, llamó a Fabián y le preguntó cuánto faltaba para que pudiera llegar.

Cuando pensó en el daño que le había causado en el pasado, se preguntó: ‘¿Cómo podría tener queja alguna?’.

“Por favor, escúchame, Linnie”. Jeremy intentó acercarse a ella.

Madeline inclinó su rostro fríamente hacia él. “No quiero escuchar ni una palabra más de ti. No voy a suplicar tu confianza. Jeremy, puedes ir a buscar a tu amada. A partir de ahora, no quiero volver a verte”.

La garganta de Jeremy se movió ligeramente mientras el hombre se tragaba su dolor. “Linnie, yo, Jeremy Whitman, solo te amaré a ti en toda mi vida”.

“Je”. Madeline rio suavemente, y sus preciosos ojos se posaron en el rostro suplicante y de aspecto manso de Jeremy.

Madeline sintió como si nunca hubiera visto una expresión así, y se quedó brevemente aturdida.

Al notar la leve reacción de Madeline, Jeremy intentó acercarse a ella nuevamente, y luego la agarró de repente de la mano.