Esposa Pecadora romance Capítulo 1858

Por otro lado, Carter conducía a toda velocidad de vuelta a su villa.

Con pasos apresurados, Carter, empapado por la lluvia, entró corriendo a la sala de estar con la inconsciente Shirley en brazos.

Camille y Ada, quienes estaban en la sala de estar, se sorprendieron al ver que Carter regresaba cargando a Shirley inconsciente y empapada.

“¿Cómo terminó así?”. Camille, con los ojos llenos de preocupación, le ordenó inmediatamente a la sirvienta: “¡Traiga al doctor Lane inmediatamente!”

La sirvienta cumplió apresuradamente la orden.

Mientras Ada se quedaba a un lado, mirando al preocupado Carter mientras llevaba a Shirley arriba, Camille siguió a Carter.

Cuando Ada vio lo preocupados que ellos estaban por Shirley, la ira subió al pecho de Ada, pero una sonrisa apareció en su rostro.

Podía ver con sus ojos, por supuesto, así que sabía que Shirley había salido a la lluvia.

A juzgar por lo mojada que estaba Shirley, debía de haber estado bajo la lluvia durante mucho tiempo. Además, con la muerte de Adam y Cathy, Ada estaba segura de que Shirley no podría mantener al niño en su estómago.

Después de que Carter llevara a Shirley de regreso a la habitación, buscó rápidamente ropa limpia para Shirley y se encargó de cambiarla personalmente.

Camille estaba extremadamente preocupada a un lado. “¿Corrió hacia la lluvia? ¿Cuánto tiempo estuvo bajo la lluvia? ¿Olvidó que ahora es una mujer embarazada?”.

Mujer embarazada.

Por alguna razón, estas dos palabras sonaron anormalmente punzantes para Carter porque recordó lo que Shirley había dicho no hacía mucho.

‘Carter, el niño en mi vientre nunca tuvo la oportunidad de venir a este mundo’.

Mientras sus palabras se repetían en los oídos de Carter, este sintió un escalofrío en la columna vertebral.

No tardó en llegar el doctor Lane.

Le hizo un chequeo básico a Shirley y de inmediato revisó al bebé en el vientre de Shirley.

Sin embargo, la expresión de Carter era sombría. “Quiero saber qué le pasa”.

Examinó algunos de los datos del escritorio en el que Shirley había estado trabajando antes y luego se dirigió al refrigerador.

Tras introducir el código de acceso de la nevera, miró por todas partes y no encontró lo que estaba buscando.

En realidad, él sabía muy bien que no estaba ahí.

Ese ingrediente en particular dentro del reactivo antitoxinas para el AXT69 se encontraba exclusivamente en San Piaf y era extremadamente raro.

Carter no podía entender por qué Shirley quería entregarle a Jeremy el reactivo antitoxinas que había desarrollado.

‘Debe haberse vuelto loca. Está loca’.

La rabia de Carter estaba empezando a estallar cuando una sirvienta corrió apresuradamente hacia la entrada del laboratorio.

“Señor Carter, la señorita Shirley Brown está despierta”.