Esposa Pecadora romance Capítulo 2029

"Escuchaste todo, ¿cierto?". Carter fue directo con ella.

Shirley preguntó con calma: "¿Quién es Evan? ¿Por qué vas a reunirte con esa persona?".

Carter escaneó el rostro de Shirley con calma antes de dirigirse al baño. "No necesitas saber demasiado. Solo tienes que seguir mis órdenes".

No parecía que quisiera darle explicaciones, pero después de decir eso, Carter escuchó que Shirley se reía fríamente detrás de él.

"Sí, no necesito saberlo. Soy como un payaso sin dignidad, y solo necesito escuchar las órdenes y arreglos del Señor Carter".

Carter se detuvo de repente.

Cuando se dio la vuelta, Shirley ya había entrado en su habitación con su vaso de agua y había cerrado con fuerza la puerta.

¿Payaso?

Carter bajó la mirada y se rio de sí mismo. Actualmente, era él quien parecía un payaso.

A la mañana siguiente.

Cuando Shirley se despertó, se dio cuenta de que Carter se había ido.

Vio el desayuno sobre la mesa y supo que Carter lo había preparado para ella.

Luego vio que él había preparado dos porciones de desayuno.

¿Preparó a propósito algo extra para Lillian? ¿Solo era terco en la superficie, pero realmente es blando en su interior? ¿Aún había bondad en su corazón?

Shirley pensó en silencio. Después de ayudar a Lillian a lavarse, le dio algo del desayuno.

"Lily, toma un poco. No te quedes con hambre". Shirley sonrió gentil y amablemente.

Lillian asintió obediente e inteligentemente. De repente, Shirley sintió una punzada en el corazón. Las lágrimas también comenzaron a brotar de sus ojos.

Inconscientemente, Shirley levantó la mano para tocar su vientre vacío.

'Sé que me culpas, pero está bien. Vendré a buscarte después de un tiempo, así que cuando llegue el momento, me arrepentiré de los pecados que te he hecho'.

Shirley pensó en silencio y levantó la mano para secarse las lágrimas.

En ese momento, tuvo una idea.

Carter se había ido, ¿significaba eso que tenía la oportunidad de llevarse a Lillian de aquí?

Shirley, que ya no tenía ganas de desayunar, movió inmediatamente su silla de ruedas hacia la entrada.

Al ver esto, Lillian bajó el vaso de leche en su mano y se dirigió hacia la puerta.

Sin embargo, Shirley intentó abrir la puerta unas cuantas veces, pero falló.

Por supuesto.

¿Cómo no iba a saber Carter lo que ella tendría en mente?