Esposa Pecadora romance Capítulo 2035

Fabián se quedó callado cuando Evan lo invitó; parecía como si Fabián estuviera dudando.

“Fab, solo ven. No tienes nada que hacer ahora, de todos modos, deberías dejar que Lily descanse después de cenar. Tienes tantos sirvientes en casa, así que no tienes que preocuparte de que no haya nadie cerca para cuidarla”.

Evan continuó invitando a Fabián. Era evidente que no sabía del secuestro de Lillian.

Fabián lo pensó y finalmente decidió aceptar.

De hecho, Lillian estaba desaparecida ahora mismo y no podía hacer nada incluso si volvía a casa. Sería mejor si fuera a ver a Evan y obtener más información sobre por qué Carter vino al País F.

No mucho después, Fabián condujo hasta el bar que mencionó Evan.

Acababa de oscurecer, pero ya había una atmósfera animada y amorosa en el bar.

Tan pronto como Fabián entró al lugar, había muchas mujeres atractivas y con poca ropa coqueteando con él. Incluso se acercaron mujeres para pedirle su número.

Sin darles la más mínima oportunidad, Fabián las rechazó a todas.

Era joven y vigoroso, pero Fabián no tenía ningún interés en estas mujeres, independientemente de que fueran o no su tipo.

No le interesaban las mujeres hermosas, las lindas, las atractivas o las adorables.

En su mente, solo estaba Lillian, cuyo paradero era desconocido, cuyas circunstancias eran desconocidas.

No sabía cuándo comenzó a prestarle atención especial a esa niña.

No sabía si era porque se sentía tan solo después de la muerte de Yorick y Lana que quería cuidar de Lillian por el resto de su vida. Haría cualquier cosa mientras Lillian permaneciera a su lado.

Fabián fue directamente a la sala de personas importante que Evan había reservado.

La habitación era enorme, y cuando Fabián empujó la puerta para entrar, vio a una docena de personas reunidas para beber y divertirse.

Cuando Evan vio a Fabián, inmediatamente le recordó a las dos mujeres jóvenes con aspectos sobresalientes al lado de él.

“El Joven Amo Johnson en el que han estado pensando está aquí. Apúrense y denle la bienvenida”.

“Déjate de tonterías. Apúrate”.

Fabián instó con impaciencia.

Evan frunció el ceño con impotencia. “Se están divirtiendo ahora, así que ¿no es inapropiado echarlos?”.

Fabián levantó las cejas. “Bueno, entonces me iré”.

“No, no, no”. Rechazó la idea rápidamente y le dio una sonrisa de felicidad. “Eres mi Joven Amo Johnson. No te echaría ni aunque tuviera que echarme a mí mismo”.

Bromeó y luego dijo seriamente.

“Todos, necesito hablar con el Joven Amo Johnson sobre algo serio. Por favor, diviértanse un poco. Nos divertiremos juntos más tarde”.

Dado que Evan era el que pagaba por este lugar, nadie se atrevió a decir que no. Rápidamente empacaron sus cosas y se fueron.