Esposa Pecadora romance Capítulo 426

Madeline controló sus emociones rápidamente y sonrió. “Jeremy, el abuelo quiere descansar. Regresemos".

La mirada de Jeremy se centró, fijamente, en la fugaz burla que había en los ojos de Madeline. Él asintió levemente. "Okey".

Después de regresar, Madeline se dio una ducha fría para calmarse.

‘El abuelo realmente parece haber descubierto mi verdadera identidad y, deliberadamente, me recordó que me mantuviera alejada de Felipe’.

'¿Será que el abuelo ya ha investigado algo, en secreto?’

‘Tengo que acelerar las cosas’.

‘Si sigo adelante, Jeremy me descubrirá, tarde o temprano’.

‘Después de todo, su coeficiente intelectual no es bajo’.

A medianoche, Madeline abrió lentamente los ojos, después de que Jeremy se durmió.

Se apartó suavemente del abrazo de Jeremy y se dirigió a su estudio, a la luz de la luna.

Después de observarlo, esos días, Madeline estaba segura de que el estudio de Jeremy no estaba equipado con un sistema de seguridad.

Ella encendió las luces y miró los documentos, en el escritorio de su estudio. La mayoría eran documentos de la empresa, pero todos carecían de importancia.

Madeline encendió la computadora y se mostró la pantalla en la que debía ingresar una contraseña, para poder ingresar a la cuenta del administrador.

Contraseña...

‘¿Qué contraseña él puso?’.

Madeline intentó ingresar las fechas de nacimiento de Jeremy y Meredith, pero ambos fallaron.

Cuando estaba a punto de rendirse, una pequeña figura apareció en la entrada del estudio. "Mamá".

"Mamá, espérame". Jackson se dio la vuelta y salió, después de decir eso. Cuando regresó, tenía un teléfono en la mano.

Madeline inicialmente pensó que Jackson había anotado la contraseña de Jeremy en su teléfono, pero lo vio abriendo un software que ella no conocía. Luego, conectó el teléfono a la computadora. Después de eso, se procesó por un tiempo y los ocho números no tardaron en aparecer, continuamente en la pantalla del teléfono.

Al ver los números que habían aparecido, Madeline se quedó sorprendida.

‘¿Esta es... la contraseña de inicio que estableció Jeremy?’.

‘¡¿Cómo puede ser?!'.

Ella miró el familiar número de ocho dígitos, con incredulidad, e inmediatamente vio a Jackson ingresando los números en la computadora. Después de presionar la tecla de intro, la computadora se desbloqueó, al instante.

Al mismo tiempo, sonó una notificación desde el teléfono de Jeremy.

Abrió sus negros y profundos orbes y vio sus brazos vacíos. Luego, miró su teléfono antes de levantarse y caminar hacia el estudio...