Esposa Pecadora romance Capítulo 496

Aunque Madeline no aceptó las rosas, él se sintió bastante feliz con su silencioso reconocimiento.

Sin embargo, Madeline tiró los papeles del divorcio al asiento del conductor, nada más subir al coche.

"Ya he firmado mi parte. Devuélvemelo, cuando termines de firmar la tuya".

Jeremy sintió que su corazón se hundía, en el momento en que puso sus ojos en las palabras que encabezaban el documento.

Obligándose a no pensar demasiado en ello, guardó los papeles y pisó el acelerador.

"Jack no ha sabido lo que es una familia completa y feliz, durante los últimos seis años, Eveline. ¿Realmente...?".

"No intentes usar a Jack como excusa para no firmar los papeles, Jeremy. No sé lo que intentas ganar, pero te haría bien dejar de creer que yo crearía tus mentiras, sobre tu amor hacia mí".

El tono de Madeline era frío y no dejaba lugar a las negociaciones.

Por lo tanto, Jeremy se mantuvo callado y se sumió en su propia angustia.

Al llegar a la guardería, Madeline se trasladó al asiento trasero para poder hablar con Jackson, con más facilidad.

Su corazón se apretó, cuando vio a Jeremy en las facciones del niño.

“Mamá está muy feliz de verte de nuevo, Jack”.

‘Saber que todo el dolor que he soportado ha llevado a nuestro reencuentro, hace que todo valga la pena. Mamá está lo suficientemente satisfecha con la forma en que están las cosas'.

Madeline no protestó mientras Jeremy los conducía a la villa.

Al entrar, Madeline se dirigió inmediatamente a la cocina, para preparar la cena.

Mientras tanto, Jeremy se sentó y guió a Jackson en sus deberes. Cuando los terminó, también lo hizo Madeline con la cena.

Jeremy sintió que se le encogía el corazón, mientras miraba los apetitosos platos y la sopa sobre la mesa.

Ella también le preparaba la cena, por aquel entonces.

Sólo que nunca volvió a casa.

Sin embargo, a diferencia de lo que pensaba Madeline, no fue porque pasó la noche con Meredith.

La luz plateada de la luna brillaba sobre sus espaldas, envolviéndolos en un brillo reconfortante.

Sólo cuando volvieron a la villa, y Jeremy arropó a Jackson para ir a la cama, Madeline volvió a su actitud distante. Volvió a entregarle los papeles del divorcio. "Fírmalos".

Jeremy frunció las cejas. "No lo haré".

Era una respuesta conocida, una que Madeline ya le había dado antes, con obstinación.

"Ya me equivoqué una vez y no quiero volver a hacerlo". Jeremy fijó su mirada en Madeline.

"Dame otra oportunidad, Linnie. ¿Por Jack y por Lily?".

Madeline se quedó callada, durante dos segundos. "Ya te he dicho que Lillian no es tu hija".

"Lily es nuestra hija". La mirada de Jeremy era cálida. "Me niego a creer que te lanzarías a los brazos de otro hombre, después de haber sido tan profundamente herida por este b*stardo, que tanto amabas".

Caminó lentamente hacia Madeline. "Lily es nuestra hija, Linnie. Te quedaste embarazada de ella, desde el momento en que te tomé por la fuerza en ese apartamento, hace tres años".