Esposa Pecadora romance Capítulo 497

Los ojos de Madeline se encendieron mientras apretaba los puños con fuerza, su tono sonaba decidido. "¡Lily no está relacionada contigo, de ninguna manera, Jeremy! Deja de hacerte ilusiones".

Su control sobre sus emociones se aflojó mientras luchaba por negar. "Es porque me hiciste tanto daño, maldito, que me entregué a Felipe. Él fue el único rayo de luz, en la oscuridad en la que me metiste".

Madeline se encontró con la mirada, cada vez más sombría, de Jeremy.

"Lillian es hija de Felipe y mía. Nunca tendrá una persona como tú, como padre, ¡así que deja de juntar a Lillian con gente como tú!".

Con eso, Madeline levantó la mano para apartar al hombre que tenía delante.

Sin darse cuenta de lo deshuesadas que se habían quedado sus piernas, Jeremy sintió que se tambaleaba hacia atrás ante el empujón.

Madeline cogió su maleta y salió de la villa, sin volver a mirar.

Sentada en el taxi que había contratado para volver a casa, la mente de Madeline empezó a hacer un viaje por el carril de los recuerdos...

Levantando su débil cuerpo, Madeline hizo que Ava la llevara al lugar del compromiso de Jeremy y Meredith.

Le dolía el corazón, pero se las arregló para soportar las frías palabras del hombre al que amaba, y el odio de sus queridos padres, con una sonrisa, hasta que no pudo soportarlo más.

Estaba tan segura de que había muerto, en el lugar del compromiso, y nunca esperó que Jeremy actuara tan fuera de lo normal, al acercarse corriendo a abrazarla, preguntándole qué le pasaba.

Había perdido el conocimiento, a las dos frases.

Pensó que estaba acabada.

Sin embargo, se despertó de nuevo. Esta vez en el hospital real del País F, con un caballeroso y elegante Felipe Whitman frente a ella.

La había salvado, desde su último aliento.

En el hospital real del País F, Madeline se sometió a una operación de extirpación del tumor.

Madeline sacaba a Jackson a pasear, después de la cena, pero volvía a la villa con Jeremy a cuestas.

Madeline sólo se fue cuando Jackson se había duchado y se había ido a dormir

Madeline permaneció indiferente, cuando se trató de Jeremy, pero éste ya estaba lo suficientemente satisfecho.

No tenía ninguna otra excusa ni método para ponerse en contacto con Madeline, así que vio lo que tenía ahora como un inmenso regalo del cielo.

Al mismo tiempo, Jeremy recibió una notificación judicial.

La Corporación Whitman iba a ser multada con una cantidad estruendosa, por el cese forzoso en unos proyectos asociados con RS y Sudamérica.

Aunque la cantidad debería haber sido tratada por el departamento de finanzas de la Corporación Whitman, de alguna manera terminó en manos del Viejo Maestro Whitman.

Al no poder pagar la deuda, la mansión Whitman iba a ser subastada.