Esposa Pecadora romance Capítulo 507

"¿Por qué tengo que apostar, contigo? Yo decido cómo quiero que sea mi vida. Tú no puedes controlarla", contestó Madeline secamente, con los ojos llenos de confianza.

"No tienes que firmar los papeles, ya que puedo apelar a un divorcio, alegando que llevamos más de dos años separados. En cuanto a la custodia de Jack, no la cederé".

Madeline se dio la vuelta y se fue.

Esperando al lado, Eloise y Sean no pudieron hacer nada mientras veían cómo Madeline se alejaba de Jeremy, con el disgusto en la cara.

Aunque Jeremy era su yerno, también había herido profundamente a Madeline.

No tenían derecho a reprender a Jeremy, porque sus errores eran peores como padres.

…

El caso de Meredith escaló rápidamente las tendencias, enfureciendo a innumerables internautas, con su brutal personalidad.

Escondidos en un motel, Rose y Jon temblaban de indignación, mientras veían las noticias del juicio de Meredith. Dejaron caer el control remoto al suelo.

"¡La pena de Meredith es en un mes! ¿Qué vamos a hacer? ¡No puedo creer que Jeremy tenga semejante prueba bajo la manga!", Rose gimió intranquila.

Jon permaneció en silencio, lo que provocó un empujón de Rose. "¡Di algo!".

"¿Qué quieres que diga? ¿Que deberíamos sacarla de la cárcel?". Jon abrió las palmas de las manos con impotencia.

"¿Así que vas a ver morir a Meredith? Sigue siendo nuestra hija". Rose apretó la mandíbula con disgusto. "Qué hija más inútil. Meredith pasó años con Jeremy y ¿me estás diciendo que ni siquiera ha conseguido un lugar en el corazón de ese hombre? No habría que matarla a tiros, si hubiera sido un poco más útil".

"¿De qué sirve decir todo esto, cuando Meredith mató a dos personas? ¿Cómo esperas que la salvemos?". Jon no mostró ningún deseo de ayudar a Meredith. "Ya hemos hecho todo lo que podemos. Meredith fue tan estúpida como para confesar haber matado a Brittany, en el tribunal".

Rose frunció el ceño y cerró los puños, con indignación.

"Meredith estuvo tan cerca de ser la Sra. Whitman y la Srta. Montgomery. ¡Estábamos tan cerca de vivir el resto de nuestras vidas, sin preocuparnos por nuestras cuentas bancarias! ¿Quién hubiera pensado que esa maldita perra regresaría viva? ¡Esto nunca habría sucedido, si no fuera por ella!".