Esposa Pecadora romance Capítulo 522

"No hay necesidad de agradecerme. Es gracias a ti que puedo recuperar las cosas, que originalmente pertenecieron a mis padres".

Cuando las palabras llegaron a sus oídos, Madeline de repente sintió como si hubiera pecado profundamente.

Al poder volver a la vida, su propósito era buscar venganza.

Estaba encantada de ver a Jeremy en tal miseria, terminando sin nada. Sin embargo, no quería que las llamas de su venganza afectaran al Viejo Maestro Whitman.

Después de que Felipe dejó la escena, Madeline llamó a Jeremy.

Jeremy se sorprendió cuando recibió su llamada, pero aún así apareció en el lugar donde Madeline quería encontrarse con él.

Después de encontrarse, condujo el automóvil y finalmente llegó a un asilo de ancianos.

"¿Es aquí donde se está quedando el abuelo?". Madeline lo consideró bastante inaceptable.

"El ambiente y las instalaciones aquí, son muy buenas". Jeremy luego dirigió el camino a seguir.

Madeline sabía que, para un anciano, no importaría qué tan bien fuera su entorno de vida o qué tan bien comiera. Nunca sería tan bueno como tener a sus hijos y parientes, a su alrededor.

Madeline no podía permitir que el Viejo Maestro Whitman pasara el resto de su vida en ese lugar. "Felipe me ha prometido que devolverá la Mansión Whitman al abuelo".

Jeremy sonrió profundamente. "¿De verdad crees que lo hará? Linnie, todavía eres un poco ingenua".

Madeline miró a Jeremy con insatisfacción. Cuando estaba a punto de decir algo, su mirada fue captada por el Viejo Maestro Whitman, que estaba practicando Tai Chi en el jardín, no muy lejos.

El abuelo parecía estar mucho más enérgico, que antes.

El Viejo Maestro Whitman también observó a Madeline, y sus ojos seguían tan amables y pacíficos como siempre.

"Puedes hablar con el abuelo, primero. Contestaré una llamada telefónica". Jeremy parecía intentar, deliberadamente, crear tiempo a solas para Madeline y el abuelo Whitman. Después de decir eso, simplemente se alejó.

Después de que el Viejo Maestro Whitman terminó su rutina de Tai Chi, sonrió amablemente y saludó a Madeline. "Madeline, viniste".