Esposa Pecadora romance Capítulo 585

"¿Por qué?". En el rostro de Felipe había una mueca ilegible. "Si fui capaz de resucitar a Madeline, entonces puedo dejar que ame u odie a quien quiera".

Jeremy bajó la cabeza, para mirar a la mujer en sus brazos, con una mirada suave. Cuando volvió a levantar la cabeza, sus ojos eran como picos de hielo, al penetrar bruscamente en Felipe.

"Nadie puede manipular las emociones o pensamientos de Linnie. Felipe, Linnie verá tu verdadero yo, algún día".

Felipe se rió. "No pasará", dijo mientras se acercaba a Jeremy. A contraluz del coche, su bello rostro estaba cubierto por una sombra oscura.

"Jeremy, aprecia tus dos últimos días con Maddie, porque pronto la perderás por completo".

Felipe terminó su frase con una carcajada. Luego, se dio la vuelta y se dirigió a un lado de la carretera.

Un conductor le abrió la puerta, antes de que se alejaran a toda velocidad.

Jeremy no quería perseguirlo, ya que ahora mismo sólo tenía en mente a Madeline.

Llevó a Madeline al hospital. Era hora de que Adam saliera del trabajo y, en cuanto salió del hospital, vio a Jeremy cargando con una Madeline inconsciente, mientras corría hacia él frenéticamente.

Adam volvió a entrar, asombrado, cuando escuchó a Jeremy decirle la razón por la que Madeline se desmayó.

"¿No salvó Felipe a Madeline, antes? ¿Por qué le hizo eso, ahora?".

"Quiere vengarse de mí", dijo Jeremy, con tono firme. Sus ojos se llenaron de preocupación mientras miraba a Madeline, que seguía sumida en un profundo sueño. "Adam, ¿qué pasará con Linnie, cuando se despierte?".

"No puedo darte una respuesta precisa. Sin embargo, hay una gran posibilidad de que vuelva a ser la Madeline que te ama".

Jeremy no pudo sentirse feliz, ni siquiera después de recibir esta respuesta.

En realidad, se dio cuenta de que Madeline actuaba y hablaba de forma diferente, desde hace unos días.

Aquel día en que Madeline desenmascaró a Yvonne, como la verdadera maltratadora, su mirada y su aura eran las de su fuerte personalidad.

Madeline parpadeó y levantó sus ojos aturdidos, para mirar a Jeremy.

Jeremy empezó a preocuparse. Tenía miedo de que Madeline lo apartara y le dijera que se fuera. También temía que ella no le conociera.

"¿Linnie?", hablaba con cautela y preocupación en sus ojos.

"Jeremy, ¿por qué estoy en el hospital, otra vez?", preguntó Madeline, con curiosidad; su tono amable hizo que Jeremy dejara escapar un suspiro de alivio.

"Linnie, ¿no recuerdas lo que pasó, antes de que te desmayaras?", preguntó con insistencia.

Madeline frunció el ceño y trató de recordar. Entonces, sacudió la cabeza. "Me duele la cabeza".

"No lo pienses, entonces, ¿vale?".

"De acuerdo". Madeline asintió obedientemente. Luego, sonrió tímidamente a Jeremy. "Jeremy, te hice preocupar, de nuevo".