Esposa Pecadora romance Capítulo 588

Jeremy levantó su fría mirada. Su gélida mirada se congeló, sobre el apasionado y expectante corazón de Meredith.

"Sólo he amado a una mujer en esta vida y esa mujer es Linnie. En cuanto a ti, ¿crees que algún hombre querría a una mujer siniestra y despreciable, como tú?".

"¡Eh!". Meredith se rió amargamente. Luego, apretó los puños. Sus ojos también estaban llenos de intensos celos y odio. "Muy bien, qué respuesta tan directa. ¡Es tan directa que moriré con el agravio restante!".

Se mordió el labio con fuerza, desgarrando la carne. No lo soltó ni siquiera cuando la sangre empezó a brotar de la herida.

Jeremy no tenía ningún interés en verla, en ese miserable estado, así que pidió con impaciencia: "No tengo tiempo que perder. Sólo escúpelo".

Meredith se rió amargamente de sí misma, cuando Jeremy se negó a mirarla. "Jeremy, voy a morir, mañana. ¿Por qué no me miras? ¿Soy tan horrible? Antes siempre me decías que era la mujer más hermosa y amable del mundo".

El asco en los ojos de Jeremy, era ahora aún más evidente.

"Si no te hubiera confundido con Linnie, ¿crees que serías digna de esos elogios? Meredith, no intentes asquearme, incluso antes de tu muerte".

"¿Te da asco?".

La expresión de Meredith cambió, mientras sus manos ásperas y amarillentas se agarraban a los barrotes de hierro. "Soy asquerosa, pero ¿por qué hice todas esas cosas asquerosas? ¡Las hice todas por ti! Renuncié a mi reputación por ti, así que ¿por qué sigues sin mirarme? ¿Por qué nunca me tocaste, durante todos estos años que estuve contigo?".

Jeremy se sorprendió, cuando Meredith admitió de repente que nunca habían intimado. El apuesto rostro de Jeremy cambió, después de escuchar eso.

Aunque él ya había adivinado que nunca la había tocado, seguía siendo sorprendente escucharla decirlo, en voz alta.

…

Madeline terminó su borrador en el estudio y se dispuso a ir a ver al Viejo Maestro.

Se levantó y miró por la ventana, inconscientemente. Entonces, se dio cuenta de que había empezado a lloviznar, sin que ella lo supiera.

La lluvia no era intensa, pero el cielo estaba gris.

Madeline escuchó lo que dijo Felipe y su rostro se tranquilizó. "Sólo sé que ahora quiero mucho a Jeremy".

"¿Le sigues queriendo, incluso después de que te haya utilizado y te haya mentido?", preguntó Felipe con calma y con un toque de desolación en sus ojos.

Madeline respondió, con firmeza: "Sí, le quiero".

Felipe suspiró decepcionado. "Maddie, esperaré a que te recuperes. Te esperaré, pase lo que pase".

Después de hacer su promesa, sostuvo su paraguas y se dio la vuelta bajo la lluvia.

Madeline ya no le prestó mucha atención. Sin embargo, cuando estaba a punto de volver a la casa, oyó un sutil tintineo. Parecía que algo se había caído del bolsillo de Felipe.

Inconscientemente se giró para mirar lo que había caído del bolsillo de Felipe. En ese momento, su expresión cambió.