Esposa Pecadora romance Capítulo 706

No hubo ningún cambio en la expresión de Felipe.

Era como si esta mujer no fuera la misma persona con la que se había acostado anoche.

Madeline le devolvió la sonrisa. "Buenos días, Cathy." Ella sonrió y se giró hacia Felipe. "Le prometí a Jack que lo llevaría a la librería más tarde, así que me iré ahora".

Felipe la miró con amor en sus ojos. "Te llamaré más tarde".

"Esta bien". Ella asintió. Antes de irse, le dijo: "No bebas más".

Felipe asintió y vio como ella se alejaba.

Cathy miró la hermosa y suave sonrisa en el rostro de Felipe antes de bajar la cabeza con desánimo.

Ella sabía claramente que no debía sentir nada por Felipe. Sin embargo, él también era una obsesión que ella no podía dejar después de tantos años.

…

Cuando Madeline volvió a la Mansión Montgomery, llevó a Jackson a la librería.

Sean y Eloise planeaban llevar a Lillian al parque infantil, pero cuando ésta vio que Madeline se llevaba a su hermano a la calle, ella parpadeó con sus ojos vivaces y les rogó que la acompañaran.

Lillian tenía solo tres años, por lo que se veía infantil en todos los aspectos.

Madeline no podía ocuparse de dos niños sola, así que Eloise estaba más que contenta de ir con ellos. Sin embargo, cuando estaban a punto de salir, Jeremy apareció en la puerta.

Eloise se sorprendió al ver la luz de sus ojos y que podía caminar sin ayuda. No esperaba que él recuperara la vista.

"¡Señor guapo!". Lillian corrió a abrazar a Jeremy en el momento en que lo vio.

Jeremy cogió a la pequeña y tierna niña y miró su cara que se parecía a la de Madeline. Le tenía mucho cariño, pero sintió una pizca de amargura en su corazón.

¿Era ella la hija de ellos?

"¿Por qué estás aquí?", preguntó Madeline a Jeremy con frialdad.

"Le dije a papá que viniera", respondió Jackson, "quiero salir con papá, mamá y Lily".

Sin embargo, Madeline ignoró a Jeremy durante todo el día. Él solo podía tragarse su soledad y su miseria.

De camino a casa, Lillian pidió un globo. Por eso, Jeremy la cargó y la dejó escoger un globo de color rosado y azul que tenía un dibujo animado. Sin embargo, antes de que ella pudiera sostenerlo en la mano, el globo se reventó.

Lillian se asustó e inmediatamente enterró su cara en el cuello de Jeremy, estallando en lágrimas.

Jeremy se sintió desconsolado al ver las lágrimas que rodaban sin control por las mejillas de la niña.

Él la calmó suavemente por un largo tiempo antes de que ella dejara de llorar. Finalmente, ella se apoyó en su hombro y se quedó dormida por el cansancio.

Sin embargo, esta intensa angustia y preocupación hizo que Jeremy volviera a sospechar.

Él arrancó un mechón de cabello de Lillian y lo guardó en el bolsillo. Después de irse a casa, fue inmediatamente a un laboratorio para hacerse una prueba de ADN.

Esa noche, dio vueltas y vueltas en la cama mientras estaba completamente despierto. Al día siguiente, recibió el informe de la prueba.

Mientras se desplazaba por el correo electrónico, su mano temblaba suavemente hasta que vio las palabras que le impactaron...