Esposa Pecadora romance Capítulo 746

Aunque Felipe se había puesto en contacto con ella mientras estaba fuera, Madeline no hizo ningún movimiento para responder.

Jeremy, sin embargo, había permanecido en silencio.

Como si entendiera su deseo, él ya no la molestaba.

A los pocos días de su regreso, Madeline se ocupó de los asuntos de su trabajo antes de llevar un cheque firmado y algunos documentos a la Villa de Felipe.

Felipe no parecía estar presente cuando ella llegó. Madeline entró y se encontró con Cathy sentada abatida en el sofá. Su complexión era horrible y no parecía estar en el mejor estado mental.

"¿Estás bien, Cathy?", Madeline se acercó y preguntó.

Cathy volvió a la realidad y se dio cuenta de que Madeline estaba allí. “¿Por qué estás aquí, Eveline? Felipe salió”.

"Llámame Evie, Cathy".

La expresión de Cathy se transformó en confusión. "¿Por qué?".

Madeline negó con la cabeza, con una pequeña sonrisa. “En cambio, hablemos de ti, Cathy. ¿Cómo estás? ¿Por qué te ves tan perdida?”.

"¿Mmm? Estoy bien". Cathy sonrió con despreocupación.

Oh, cómo ella deseaba tener a alguien con quien hablar de sus problemas, pero Madeline no era una opción.

Desde que Felipe se dio cuenta de que ella había quedado embarazada y abortó al niño, él recurrió a castigarla todas las noches con un aura de ira pura.

Su cuerpo aún no se había recuperado de su aborto.

A pesar de que Cathy dijo que estaba bien, Madeline no dejó pasar el asunto y en su lugar preguntó, amablemente: “¿Le pasa algo a tu bebé? Puedes decirme si te sientes incómoda en algún lugar. Podría ser capaz de ayudarte".

Los ojos de Cathy se enrojecieron ante la mención del niño abortado. "El bebé ha fallecido".

Madeline se quedó boquiabierta. "¿Cómo puede ser?".

"Quizás este niño nunca estuvo destinado a ser mío". Cathy se secó las lágrimas que se acumulaban alrededor de sus ojos y de repente se acercó para agarrar la mano de Madeline, suplicando: "Puede que no sepa lo que pasó entre tú y Felipe, Eveline, pero por favor. No te enfades más con él, ¿de acuerdo? ¡Él realmente te ama, de verdad!".

Madeline empezó de inmediato entregándole el cheque y los documentos relacionados.

Felipe les dio una mirada y frunció el ceño. "¿Cuál es el significado de esto, Eveline?".

La expresión de Madeline fue seria. “Me salvaste una vez, hace años, y eso es algo que nunca podré devolverte. El hecho de que me haya convertido en diseñadora de joyas con mi propia empresa, es inmensamente gracias a tu apoyo. Como resultado, me gustaría transferirte todas las acciones de Miss L.ady".

"¿Estás cortando nuestros lazos?". Felipe estaba lo suficientemente cerca, como para dominar toda la visión de Madeline.

"No puedo animarme a seguir siendo amiga de la persona que mató a mi hija". Madeline fue decisiva. “Todavía estoy muy agradecida de que me salvaras, en ese entonces, Felipe, y haré todo lo posible para pagarte por salvarme la vida. Sin embargo, ya no somos amigos".

Madeline luego se dio la vuelta. Ella estaba a punto de irse, cuando Felipe la agarró por la muñeca.

Ella forcejeó, pero Felipe era más fuerte y la atrajo hacia él.

Ella se inclinó, su expresión carecía de la calidez que alguna vez tuvo. Sus ojos estaban llenos de posesividad. Estaban tan cerca que, lo único que los ojos decididos de Madeline podían ver, era a él. Luego, él habló con una voz profunda de barítono que casi podría describirse como malvada.

"Sabes que eso no es lo que quiero, Eveline. ¿Quieres romper nuestros lazos? No hay problema. Siempre y cuando me pagues por salvar tu vida, contigo misma".