Esposa Pecadora romance Capítulo 756

"Por favor, Srta. Quinn". El guardaespaldas abrió la puerta. Parecía que, a pesar de su voluntad, no iban a dejarla marchar.

Justo cuando la obligaron a entrar en el coche, Madeline vio a Jeremy esperando a las puertas del hotel, con una cálida sonrisa y un ramo de flores Aliento de Bebé.

Llegó tres minutos después que ella.

Se habrían encontrado, si no la hubieran obligado a entrar en el coche.

La mirada de Felicity se posó también en Jeremy. "Qué pena. Parece que no están destinados, después de todo".

La mirada de Madeline se enfrió.

Felicity sabía de la apuesta que ella había hecho con Jeremy, hacía unos momentos.

Felicity sonrió ante la expresión de sorpresa de Madeline. "Parece que no conoces del todo a Felipe, Eveline".

"¿Qué quieres decir?".

"Mhmm". Felicity se burló y mirándola fijamente, dijo: "Pronto lo sabrás".

Entonces, el coche aceleró, alejándose de allí.

Mirando fijamente a Jeremy, que estaba de pie junto a las puertas del hotel, Madeline sintió que un gran peso de pérdida caía sobre su corazón.

Quiso bajar la ventanilla para llamarlo, pero las ventanas estaban cerradas. Quería llamarlo a su teléfono, pero el guardaespaldas se lo había quitado.

Miró en la dirección en la que estaba Jeremy, mientras la distancia entre ellos crecía, hasta que él desapareció de su alcance.

Con el ramo de Aliento de Bebé en sus manos, Jeremy esperó pacientemente, mientras los segundos y los minutos pasaban, hasta que poco a poco se superó el tiempo acordado.

La alegría desapareció lentamente de sus ojos, mientras su corazón se enfriaba.

"¿Es este realmente el final para nosotros, Linnie?". Se negaba a aceptar tal final, pues era imposible que no estuviera destinado a estar con la mujer con la que había vivido tantas experiencias de vida y muerte.

Sin pensarlo más, Jeremy reservó un vuelo de vuelta a Glendale, para ir en busca de Madeline.

En la Mansión Aliento de Bebé.

Tomando el teléfono de Madeline, Felicity envió el mensaje a Jeremy, haciéndose pasar por ella y apagó el teléfono.

Felicity se burló frívolamente, mientras miraba fijamente a Madeline, que estaba sentada valientemente en el sofá. "Veo que todavía te quiere mucho. Lo único que he dicho es que has vuelto a Glendale y enseguida ha corrido al aeropuerto a buscarte. No tardará en tomar un vuelo a Glendale".

Madeline enarcó una ceja fría y poco amigable hacia Felicity, respondiendo secamente: "Has ido muy lejos, arrastrándome hasta aquí y estafando a Jeremy para que vuelva a Glendale. Así que dime, ¿qué es lo que quieres?".

"¿De verdad quieres saberlo?". Felicity la miró con una expresión de preocupación. "Me temo que no serás capaz de soportarlo".

"Ya he muerto una vez. ¿De qué debo tener miedo?".

"De acuerdo. ¿Y si la persona que muere es Jeremy? ¿Seguirías siendo tan valiente?".