Resumo de Capítulo 865 – Esposa Pecadora por Sixteenth Child
Em Capítulo 865, um capítulo marcante do aclamado romance de Romántica Esposa Pecadora, escrito por Sixteenth Child, os leitores são levados mais fundo em uma trama repleta de emoção, conflito e transformação. Este capítulo apresenta desenvolvimentos essenciais e reviravoltas que o tornam leitura obrigatória. Seja você um novo leitor ou um fã fiel, esta parte oferece momentos inesquecíveis que definem a essência de Esposa Pecadora.
Jeremy sabía que ya no podía esconderlo más de ella. Aun así, no asintió. Al contrario, le explicó suavemente: "Linnie, no es tan malo como crees. Es solo que...".
"¿Qué?".
"Tienes síntomas de una recaída". A Jeremy le costó mucho decir esas palabras.
¿Una recaída?
Madeline recordó cómo se enfermó, cuando tuvo a Jackson.
El dolor todavía estaba fresco, ahora que lo pensaba.
Se tocó suavemente el estómago y por fin comprendió por qué Jeremy había insistido en que abortara al niño.
"Linnie, no seas tan pesimista. Le pregunté al médico y, mientras te operes, estarás bien. Además, hay casi un cien por ciento de posibilidades de recuperación".
Le tomó la mano y sintió remordimientos. Había una sonrisa forzada en su apuesto rostro.
"Linnie, en realidad... En realidad, está bien, aunque solo tengamos a Jackson. No quiero verte sufrir, de nuevo. El médico dijo que tal vez sea el estado de tu cuerpo, así que mientras no te quedes embarazada, no volverás a tener ese problema".
Cuando Madeline escuchó eso, levantó la cabeza para mirarlo.
"En realidad, tú también quieres este niño, ¿verdad?".
Los ojos de Jeremy eran firmes y no había lugar para la discusión, en su voz, cuando dijo: "Solo quiero que estés sana".
"Entiendo. Te prometo que lo estaré". Madeline le miró a los ojos y sonrió.
"Linnie, si ese es el caso, entonces organizaremos la cirugía, lo antes posible".
"De acuerdo". Madeline estuvo de acuerdo.
La franqueza de Madeline hizo que Jeremy se sintiera aliviado. Sin embargo, seguía dudando ligeramente.
Le parecía que Madeline solo le respondía tan rápido, para que dejara de preocuparse por ella.
Sin embargo, Madeline no tardó en demostrar que no le mentía, porque realmente siguió adelante con la operación.
Madeline le sonrió al preocupado hombre que tenía delante. "Jeremy, quiero a este niño".
"No. ¡No puedes arriesgar tu vida!". La expresión de Jeremy era sombría. "No puedo perderte, de nuevo".
Arrugó las cejas y tocó la cara de Madeline, con preocupación. "Linnie, escúchame, ¿está bien?".
"Si este es nuestro último hijo, entonces haré todo lo posible para traerlo al mundo". Madeline insistió. "Jeremy, sé que quieres desesperadamente a este niño, ¿verdad?".
"Pero te quiero más a ti. Quiero que esté sano y salvo, ¿entiendes?". Jeremy abrazó a Madeline mientras su corazón se rompía en pedazos. Sus profundos y roncos sollozos, viajaron hasta sus oídos. "Eveline, no puedo soportar otra posibilidad de perderte".
Madeline sintió el cuidado y la preocupación de Jeremy hacia ella. Le dio una palmadita en el hombro y se zafó de su abrazo.
"No tienes que preocuparte por mí. Estaré bien, conozco a alguien que puede ayudarme".
"¿Estás hablando de Adam?".
La pregunta de Jeremy sorprendió a Madeline.
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